Huirapuca fue un aguafiestas
El equipo tucumano derrotó a Belgrano, que celebraba un récord del Oso Galli
La mesa estaba servida en Virrey del Pino 3456. Belgrano Athletic festejaba los 350 partidos de su referente histórico, Alejandro Galli, que igualaba a Guillermo Tramezzani en el récord de presencias en la historia del club. Pero el vigente campeón de la URBA no contaba con que su invitado, Huirapuca, le arruinaría el agasajo. Los tucumanos, que afrontaron medio partido con un jugador menos por una expulsión, dieron la sorpresa y se quedaron con un triunfo por 17-15 que dejó mal parado al equipo marrón en el Nacional de Clubes.
Fundado en 1953 en Concepción, Huirapuca ha experimentado un crecimiento notable. No muchos clubes tienen el orgullo de haber formado varios Pumas; pues Huirapuca forjó ocho. Hoy lo representa en el seleccionado Matías Orlando, que empezó afilado la temporada en Jaguares. Y en el pasado lo hicieron José María Núñez Piossek (tryman histórico del equipo nacional). Javier Bellotto, Hugo Dande, Osvaldo Faccioli, Gerardo Lazcano Miranda, Conrado López Alonso y Tristán Molinuevo.
Como todo club tucumano, Huirapuca (su nombre significa “viento colorado del sur”) lleva en su ADN la fiereza en cada punto de contacto –a veces con excesos–, y se lo hizo sentir a Belgrano en las formaciones. En el final del primer tiempo, el pack local forzó con el scrum la expulsión al pilar izquierdo, Lisandro Faralle, por segunda amonestación. En seguida, Juan Retamosa jugó rápido por el lado ciego y asistió a Santiago Uriburu para el try.
Parecía encaminarse Belgrano con una conquista de Pedro Bugiani y un penal de Agustin López Isnardi, pero el anfitrión nunca terminó de sentirse cómodo. Huirapuca, ganador de cuatro torneos regionales del noroeste, se las ingenió para complicarlo. Un penal de Ezequiel Faralle dio aviso. Reinó la indisciplina (seis tarjetas amarillas y dos rojas), los tucumanos sacaron provecho del contexto y revirtieron el resultado con dos tries de maul convertidos que dejaron estupefactos a los rivales. Mayor fue la sorpresa cuando el árbitro, Jason Mola, concluyó el partido mientras el reloj de la transmisión televisiva marcaba que faltaban cuatro minutos.
Fue un final polémico, que lejos estuvo de ser una excusa para el subcampeón del Nacional. “Tuvimos la pelota, pero no pensamos. Nos metimos en el juego frontal y no aprovechamos el hombre de más. Entramos en el quilombo de ellos y en lo que cobra- ban o dejaban de cobrar. No perdimos porque el árbitro terminó antes, sino porque no tomamos las decisiones adecuadas”, admitió el Oso Galli, que el mismo día cumplió 39 años. Además de su jugador más veces presente, el tercera línea es el tryman histórico de Belgrano, con 154 en 20 temporadas.
Para Huirapuca resultó un éxito memorable. “Jugar con 14 fue un plus. Que un equipo de Tucumán venga y le gane al campeón de Buenos Aires es historia. Nuestros nombres quedarán grabados siempre en la historia del club”, dijo emocionado Ezequiel Faralle, que tuvo pasos por Jaguares, Pampas y Pumas 7.
Huirapuca no sólo le aguó la fiesta al adversario; también lo persigue a un solo punto en la zona 1, con 6.