Receta educativa

Les propongo a los especialistas en educación que relacionen los aumentos salariales con los objetivos educativos. Una vez evaluados a fondo los niveles de conocimiento de los estudiantes y definidos por el Ministerio de Educación los objetivos a cumplir, deberá hacerse una evaluación al final de cada año. En el caso en que se cumplieran los objetivos propuestos en más de un 80 por ciento, que se les pague a los docentes un aumento de un porcentaje mayor, y si se cumpliera entre el 60 al 79 por ciento, un incremento menor. En el caso en que no se cumplieran los objetivos, no habrá aumento. Por otra parte, si hubiera que contemplar alguna diferenciación en los objetivos apuntados, esos especialistas podrían aportar según las distintas condiciones de infraestructura del país (vías de acceso a la escuela, condiciones edilicias, climáticas, etc.), para poder desarrollar el proceso educativo ideal. Y en lugar de aumento, ese logro se podría denominar premio anual al docente, similar al que otorgan muchas empresas a quienes cumplen los objetivos trazados. Imagino que más de uno criticará esta propuesta por “capitalista”, pero lo increíble es que la idea me surgió conversando con una persona muy instruida, más que por la escuela, por transitar la “calle” y la vida, muy trabajadora, de muy bajos recursos económicos, pero de elevados valores humanos. De más está decir que esto repercutirá en el mediano plazo en lograr un mejor futuro para nuestro país. Ezequiel M. Maschwitz

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