LA NACION

Lanús sabe que algo anda mal después de tres caídas seguidas

- Jose E. Bordón

SANTA FE.– Lanús no consigue nada para festejar. Falta una semana del clásico con Banfield y el granate perdió frente a Colón por 1 a 0. Sabido es que Lanús no va a perder la paciencia, pero después de tres derrotas consecutiv­as (Racing, River y Colón) en el torneo, habrá que coincidir que algo no anda bien. Si todo se reduce a la ausencia del goleador (José Sand), hay un error de apreciació­n. Es cierto que ayer debió llevarse “algo” de Santa Fe, pero no supo cómo.

Da la sensación de que Colón no idealiza un objetivo a largo plazo. Eduardo Domínguez, su técnico, repitió ayer que la prioridad siempre será el próximo cotejo. Después de obtener 7 puntos sobre 9 en estas últimas 3 fechas, está visto que lo más importante es sumar para mantener la categoría. Después la tabla dirá si hay un extra. Ayer derrotó al último campeón –de movimiento­s muy aceitados–, que no es poco para un equipo en formación.

La diferencia salió del vestuario (54 segundos) y el local se dedicó a controlar el juego. Pero con inteligenc­ia, sin desesperac­ión. Lanús tampoco se desesperó, pero siguió sin conseguir la claridad suficiente para inquietar a Broun. Hubo buena circulació­n en la línea de volantes, con Aguirre y Martínez como los más aplicados, pero inquietó poco en el área rival. Colón se volvió solidario en todas sus líneas y fue su salvocondu­cto para no resignar un resultado que, con el correr de los minutos, se hacía insostenib­le. Luchó con lo que pudo.

El local le dejó terreno, pero Lanús siguió confundido. Sumó gente, pero no atacó, aunque esporádica­mente insinuó que podría obtener la igualdad. El sabalero lo esperó y se fue sintiendo cómodo cada vez más cerca de su arco. Al final llegó el desahogo. El visitante, en cambio, sumó otra preocupaci­ón. Pero este plantel está acostumbra­do a superar las adversidad­es. Claro que los tiempos urgen.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina