LA NACION

aldosivi encontró soluciones en el momento indicado

- Darío Palavecino

MAR DEL PLATA.– Aldosivi lo tuvo para ganar y definir. Se lo empataron y hasta lo pudo haber perdido. Sobre el final, cuando la igualdad era casi un hecho consumado y capaz de conformar a todos, se quedó con una gran victoria gracias al uruguayo Sosa Otermín: se filtró entre la floja defensa de Arsenal y selló el 2-1 final con un zurdazo cruzado y bajo.

Un golpe durísimo para el equipo de Humberto Grondona, que acumuló así su tercera derrota consecutiv­a. Sobre todo porque durante el complement­o había hecho algunos méritos no solo para remontar la desventaja sino para dar vuelta el marcador.

Lo que se vio fue poco juego y muy trabado. Aldosivi, a cuentagota­s, mostraba mejores intencione­s. Brum asomaba como dueño en el mediocampo y Llama inquietaba. Con un remate fuerte y desde lejos avisó.

Falto de orden, Arsenal no encontraba el rumbo. La única y tibia respuesta llegó con pelota parada. Un tiro libre de Brunetta terminó con el balón en el travesaño. El local respondió con mejor puntería. Quilez recogió un rebote sobre el lateral derecho y lanzó un centro al segundo palo y Galván, con vocación de delantero, llegó para cabecear y abrir el marcador. Lo pudo liquidar el local en los primeros dos minutos del segundo tiempo. Llama, a medio metro de la línea de gol, elevó de cabeza por sobre el travesaño. Y enseguida Pellegrino le tapó un mano a mano a Bandiera.

Grondona apeló a los cambios y le dieron resultado. Centro de Rodríguez y cabezazo de Wilchez fue la fórmula para el empate transitori­o. Y el mismo impulso pudo haber tenido más premio, porque durante casi media hora Arsenal fue el protagonis­ta.

Con Galván como abanderado, Aldosivi jugó su última carta. Pellegrino volvió a ganarle un mano a mano a Bandiera y la igualdad parecía consumada. Hasta que Sosa Otermín pisó el área con decisión y liquidó la historia; los tres puntos se quedaron en esta ciudad.

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