Un legajo de Odebrecht se extravió en la IGJ
Ordenaron una investigación interna y los papeles aparecieron ocho meses después; la empresa había pedido su reconstrucción
Un legajo de Odebrecht estuvo, durante ocho meses, perdido en la nebulosa. En medio de la sensibilidad del caso Lava Jato, la Inspección General de Justicia (IGJ) –que tiene que fiscalizar los estados contables de las empresas– dio por perdidos a documentos de la gigante brasileña y ordenó una investigación interna. Sin embargo, la pesquisa fue dada de baja semanas atrás, cuando los papeles súbitamente reaparecieron.
El 2 de mayo del año pasado, la Constructora Norberto Odebrecht SA presentó los documentos para cumplir con el “Régimen Informativo Anual Abreviado”. Se trata de una carpeta que las empresas extranjeras tienen que presentar todos los años para notificar sobre su actividad, sus activos y su composición accionaria en la Argentina.
Según la documentación a la que accedió la nacion, en agosto Odebrecht quiso hacerle un agregado al expediente y pidió tomar vista de la documentación. Allí se encendió una alarma: el legajo no estaba en el casillero correspondiente. Según surge de las actuaciones, el Departamento Contable de la IGJ consignó por escrito que “habiéndose practicado una exhaustiva búsqueda del trámite, el mismo no pudo ser localizado”.
La situación fue detectada por la apoderada de Margarita Stolbizer, Silvina Martínez, que hizo un pedido de información pública para conocer si dentro de la IGJ existe una fiscalización de los estados contables de Odebrecht y cómo están los balances de la empresa.
Búsqueda y reconstrucción
Según pudo conocer este medio de fuentes de la IGJ, durante semanas, los funcionarios y empleados del organismo movieron cielo y tierra para encontrar los documentos extraviados. “Fuimos escritorio por escritorio, pila por pila. Si bien es un incidente que puede pasar, no queríamos que ocurra con Odebrecht por la sensibilidad del asunto”, reconoció una persona que estuvo al tanto del operativo.
Pasados varios meses sin tener rastro de los papeles, el 7 de marzo de este año, Odebrecht, mediante una nota de su apoderada, le requirió a la IGJ la “reconstrucción” de la carpeta. “Al día de la fecha seguimos sin obtener una respuesta ni solución. Solicitamos la reconstrucción del expediente para lo cual adjuntamos copias de todos los documentos”, señaló el escrito. La gigante brasileña no quiso sumar problemas mientras buscaba mejorar su imagen en los países en los que pagó coimas.
El 28 de abril, el inspector general de Justicia, Sergio Brodsky, firmó la resolución 0000686 en la que dio por reconstruido el expediente de Odebrecht. Por otro lado, en base a lo que dicta el reglamento de la IGJ, el funcionario pidió abrir un sumario en el Departamento de Asuntos Judiciales del organismo “a los fines de investigar los hechos”.
Sin embargo, la pesquisa interna se cortó antes de empezar. El 9 de mayo pasado, el Departamento de Control Contable de Sociedades Comerciales alertó que encontró los papeles originales y todo quedó suspendido. Desde la IGJ explicaron a la na
cion: “Estuvimos en un proceso de mudanza y los documentos quedaron traspapelados. Además, estamos en una etapa de digitalización del archivo del organismo, que es inmenso, para transparentar todos los procesos. Fue por esa dinámica de cambios que se perdieron los papeles”.
Si bien los papeles aparecieron, Stolbizer y Martínez le advertirán a la Justicia lo ocurrido en la IGJ. “No se informó dónde fue encontrado el expediente perdido ni en qué condiciones”, señaló la apoderada de la diputada del GEN.
Se espera que en las próximas horas, Martínez le remita un escrito al juez federal Sebastián Casanello (que investiga las plantas potabilizadoras de Aysa) para pedirle que investigue el episodio y que “secuestre los documentos originales de Odebrecht a fin de resguardarlos”. Antecedente
No es la primera vez que hay “objetos perdidos” en la IGJ. Durante la gestión kirchnerista habían desaparecido documentos clave del legajo de The Old Fund, el misterioso fondo que controló a la imprenta Ciccone Calcográfica y que hoy tiene sobre las cuerdas al ex vicepresidente Amado Boudou. Según pudo determinar la jueza federal María Servini de Cubría el “extravío” ocurrió semanas después de que estalló el escándalo.
En aquel entonces, los funcionarios kirchneristas alegaron que sólo se perdió un “trámite”, cuya reconstrucción “fue concluida en un breve lapso”. Lo curioso fue que, cuando llegó la gestión de Mauricio Macri, los papeles originales de The Old Fund fueron encontrados por los nuevos funcionarios a pocas semanas de asumir.
“Encontramos el legajo de The Old Fund en marzo del año pasado y se los presentamos a Servini de Cubría. El caso de Odebrecht fue distinto porque no hubo mala intención y recuperamos los papeles”, indicaron desde la IGJ.
En los próximos días se espera que el organismo termine de fiscalizar los estados contables de la gigante brasileña.