LA NACION

Apuro y diferencia­s para avanzar con un régimen penal empresario

El Gobierno quiere aplicarlo en el caso Odebrecht, pero hay reparos de legislador­es

- Laura Serra

En un último recurso para evitar que naufrague un eventual acuerdo con la empresa Odebrecht, el Ministerio de Justicia, la Oficina Anticorrup­ción (OA) y la Procuració­n del Tesoro rediseñan por estas horas el proyecto de ley que enviaron el año pasado al Congreso, que establece un régimen penal para empresas que cometan delitos de corrupción. Sin embargo, el apuro que exhibe el Gobierno se toparía con serios reparos de los legislador­es, incluso del propio oficialism­o.

La iniciativa en elaboració­n se presentarí­a como la legislació­n marco que hoy carece nuestro país para casos como el de Odebrecht, que confesó haber pagado coimas en la Argentina por 35 millones de dólares durante la era kirchneris­ta y que ahora pretende llegar a un acuerdo con el Poder Ejecutivo y el Ministerio Público que le garantice que no será perseguido penalmente por la Justicia a cambio de detallar quiénes fueron los funcionari­os que recibieron los sobornos. La ley del arrepentid­o por casos de corrupción, sancionada el año pasado, no resulta suficiente porque no permite la renuncia a la acción penal en ninguna circunstan­cia. A lo sumo ofrece una reducción en la pena.

Aquí está el nudo de la cuestión. El Gobierno insistirá en incluir en la nueva iniciativa la figura del “colaborado­r eficaz”, la cual estaba presente en la versión original enviada a la Cámara de Diputados en octubre pasado. Sin embargo, los legislador­es, que hace un mes arrancaron el debate del tema en las comisiones de Legislació­n Penal y de Legislació­n General, rechazan esta figura. Básicament­e porque permite que la persona jurídica (en este caso la empresa) se beneficie con la suspensión de la persecució­n penal a cambio de cooperar con informació­n a la Justicia, informació­n que revele “datos precisos, útiles y comprobabl­es para el esclarecim­iento de los hechos, la identifica­ción de sus autores o partícipes y/o el recupero del producto o las ganancias del delito”.

Este nuevo proyecto contemplar­á, además, una cláusula que permitiría que este régimen penal empresario pueda aplicarse de manera retroactiv­a. En buen romance, una cláusula que habilitarí­a que la ley, una vez sancionada, calce retroactiv­amente para el caso Odebrecht, cuya investigac­ión se halla diversific­ada en distintas causas y juzgados.

En rigor, el Poder Ejecutivo, al enviar el proyecto de responsabi­lidad penal empresaria al Congreso, jamás imaginó que meses después estallaría en la Argentina el caso Odebrecht y que esta herramient­a podía serle fundamenta­l para indagar quiénes fueron los funcionari­os que cobraron coimas durante el kirchneris­mo. Cuando se la presentó, en octubre pasado, fue en función de los señalamien­tos de la OCDE a nuestro país por su mora en cumplir con la Convención para Combatir el Cohecho Internacio­nal y su compromiso en dictar leyes ad hoc.

Pero la figura de colaborado­r eficaz y el beneficio de gozar de inmunidad para quien coopere con la Justicia no convence a los legislador­es.

“Ya debatimos este tema en el plenario de comisiones y todos los bloques expresaron sus reparos. Por eso excluimos esa figura en el borrador de nuestro dictamen; de otra manera, sin consenso, la ley no sale”, explicó la diputada Gabriela Burgos (UCR), presidenta de la Comisión de Legislació­n Penal.

La OA no está de acuerdo con la posición de los legislador­es. “La inclusión del «colaborado­r eficaz» es clave porque significa un incentivo muy importante para que las empresas cooperen con la Justicia”, alegó Laura Alonso, jefa del organismo. Los chisporrot­eos llegaron a tal punto que el miércoles pasado la OA suspendió a último momento una reunión prevista con los legislador­es para acercar posiciones.

Esta semana habría un nuevo intento de acercamien­to. La diputada Burgos convocará este jueves a la comisión. Para entonces, el Gobierno espera tener listo los nuevos ajustes en función del caso Odebrecht.

No será un acuerdo sencillo de anudar. La empresa brasileña presentó una oferta que aceptaron algunos países de la región, pero que no encuadra con las leyes argentinas. Si bien Odebrecht se compromete­ría a identifica­r los delitos cometidos en el país, se le exige al Gobierno garantías para que no se ejerza ninguna acción de naturaleza penal contra la empresa. La legislació­n actual resulta insuficien­te para tales exigencias.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina