Tres días sin clases por temor a los robos
Una escuela en Villa Fiorito reclama ayuda
Las motos sin patente cortan el barro con velocidad por las calles de Villa Fiorito mientras las velas rojas arden en los santuarios del Gauchito Gil. Allí, este martes pasado, tres delincuentes llegaron con armas de fuego hasta la puerta de la escuela secundaria N° 11 y asaltaron a un docente. Por eso, los directivos de la institución educativa de Lomas de Zamora decidieron suspender –durante tres días– el dictado de clases en el turno nocturno.
Un robo casi idéntico se desarrolló en el mismo lugar el 10 de mayo, cuando un ladrón –respaldado por tres cómplices– apoyó su arma en la cintura de Juan Carlos Noriega, director del colegio. “Salí de la escuela y observé que cuatro personas se acercaban. No pude evitarlo, se llevaron el auto”, recordó Noriega.
Sin embargo, esos dos asaltos son sólo un eslabón de la larga cadena de hechos delictivos que mantiene preocupados a los vecinos. En octubre de 2016, según confirmaron los docentes a la nacion, un hombre intentó ingresar en la escuela armado, y aún se desconoce con qué propósito. “Fue una situación muy violenta. Sucedió a las 10 y tenía un cuchillo”, dijeron. Desde aquel día, ladrones entraron al menos tres veces en el edificio fuera del horario escolar. Además una preceptora fue salvajemente agredida por un hombre que lanzó un ladrillo contra su cara.
“No podemos suspender las clases eternamente. Tuvimos reuniones con la policía y con funcionarios. En el turno noche estamos desamparados. Los robos son en la puerta de la escuela”, dijo Noriega.
Por su parte, Néstor Iglesias, uno de los vicedirectores de la escuela N° 11, explicó: “Hay respuestas. Pero no alcanzan. Las autoridades mandan un patrullero y nos dicen que abramos la escuela. Y el patrullero tiene que cubrir diez colegios”.