Por la construcción, sigue creciendo la capacidad instalada de la industria

Es un indicador generalmente poco tenido en cuenta, pero para muchos se trata de un índice claro de que la economía sigue en expansión y de que, en ese rumbo, las empresas comenzarán a invertir no sólo por expectativas, sino por necesidad de ampliar su propia producción.

Gracias, sobre todo, a la explosión de la construcción, la capacidad instalada de la industria siguió expandiéndose en septiembre. Según el informe de capacidad instalada del Indec, este indicador se ubicó el noveno mes del año en el 66,3%, nivel superior al registrado en el mismo mes del año anterior (que fue 63,9%).

“En septiembre de 2017, los bloques sectoriales que presentan niveles de utilización de la capacidad instalada superiores al nivel general son: refinación de petróleo (85,7%), papel y cartón (82,5%), industrias metálicas básicas (81,0%), productos del tabaco (77,3%), productos minerales no metálicos (74,7%) y productos textiles (68,3%)”, especificó el documento oficial. “Por otra parte, los bloques sectoriales que se ubican por debajo del nivel general de la industria son: sustancias y productos químicos (64,0%), productos alimenticios y bebidas (63,8%), edición e impresión (63,0%), la industria automotriz (57,1%), productos de caucho y plástico (56,9%) y la metalmecánica excepto automotores (54,7%)”, agregó el organismo estadístico.

Si bien existen sectores que por sus propias características siempre tienen un elevado uso de capacidad instalada, los rubros que mejor performance muestran en los últimos meses son los ligados a la construcción, que gracias al fuerte impulso de la obra pública, pero también a la revitalización de la pata privada, siguen empujando la actividad económica en general.

Por otro lado, llama la atención que las industrias automotriz y metalmecánica continúen aún trabajando a media máquina, más allá de algunas inversiones que el sector automotor fue concretando en los últimos meses (mañana Volkswagen presentará un fuerte desembolso en su planta de Pacheco) y a pesar de que en las últimas semanas no sólo crecieron las ventas de autos (mayormente brasileños), sino la producción y las exportaciones de unidades, sobre todo a Brasil, principal socio comercial argentino en plena recuperación.