Poética para niños, en canciones de Hilda Lizarazu
Es algo como una pincelada de magia.” Hilda Lizarazu trata de explicar qué la conecta en algunas canciones con los chicos. Suelen ir con sus padres a sus recitales. ahora será al revés: cantará para los chicos en el Festival Crea Kids, los padres serán los que acompañen a sus hijos. Una experiencia que ya había transitado en una ocasión el verano pasado y que ahora la lleva a preparar un repertorio que mezcla canciones de su propia infancia y algunos temas “más lúdicos” de su propio repertorio, como “Lucía la equilibrista”, “amapola” o incluso “Caribe Sur”. También “Florcita de alelí” –“un huayno que no sé si es específicamente para niños, pero tiene una temática poética muy bonita”– y un tema inédito, “mía tiene una hormiga amiga”. “voy juntando en mi bolsita de canciones temas que puedan disfrutar los chicos”, resume. Le preocupa estar “a la altura de los otros colegas que van a estar en el Festival, que se dedican especialmente al repertorio para chicos, en una convocatoria que me honra.” Pero se reconoce “intrépida de toda la vida” y por tanto lista para afrontar el desafío. “Hace veinte años habría dudado, pero ahora sé que hay que reírse más, que lo liviano igual puede tener contundencia.”
Los otros colegas de contundente música son mariana baggio, magdalena Fleitas y la banda rítmica Urraka, el lunes en que también canta Lizarazu. en las fechas previas se presentarán en La aldea de Pilar ( Panamericana Km 44) hoy La Pipetuá, babel orkesta, La arena Circo y mundo arlequín; y mañana Los Cazurros, el trío Pim Pau, Los raviolis y la orquesta de vientos dirigida por Sergio Feferovich con su concierto didáctico Al mundo en clarinete. ¿ Cómo se introduce Lizarazu en ese mundo de la infancia? “no hay fórmulas para conectarse con los chicos, al menos me gusta verlo así. Por algún lado conecto siempre con los chicos, no estoy pergeñando un proyecto de música para ellos. Simplemente a veces el timbre de mi voz y la música pop que hago repercute en alguna vibración que les gusta a los chicos, no sé si por algunas palabras o por el colorido. o tal vez transmita una liviandad o cierta inocencia que inconscientemente tengo y queda en la impronta de mis canciones. es algo que naturalmente me sale.”
a las propias le agregará algunas canciones del recuerdo, como “La gatita Carlota”, la que tiene por novio al Gato con botas, que habla francés e italiano y toca el violín con la cola y con las patas el piano. “me veo cantándola muy tímidamente, un poco para adentro, a los cuatro años”, dice. o la “marcha antisopa”, de Pipo Pescador. “Y obviamente maría elena Walsh, la más grande autora para chicos.” a estos temas también los tamizará con su propia impronta, adelanta. “Las estoy armando en formato trío con Federico melioli, eugenia barker y yo con mi guitarra”. recuerda su infancia gris de pupila en un colegio internado y se ríe del color de su presente: “Cada uno tiene sus propias huellas digitales. no me voy a vestir de payaso, pero ya con lo que soy es suficiente” .