El éxito que no pudo ser: un recorrido por diez historias de tristeza
La frustración de Lanús, la décima definición que terminó en derrota para un club argentino; antes, Boca, River, Estudiantes y Newell’s
La Copa Libertadores, el sueño trunco de Lanús, se convirtió también en la décima frustración en instancias decisivas de un club argentino en el máximo certamen continental. Un repaso de los sinsabores criollos. Santos - Boca (1963). El mítico equipo de Pelé ganó los dos encuentros: 3-2 en el Maracaná y 2-1 en la Bombonera. Los xeneizes, el primer club argentino en jugar una final. En Santos, estrellas como Gilmar, Mauro, Zito, Mengálvio, Coutinho y Pepe, la base santista e integrantes de la selección de Brasil que un año antes ganó el Mundial. Peñarol - River (1966). Una de las caídas más dolorosas en la historia de los millonarios: River ganaba 2-0, pero perdió 4-2 el partido desempate disputado en Chile. En Montevideo, Peñarol se impuso 2-0; el desquite fue 3-2 para los de Núñez. Nacional (Uruguay) - Estudiantes (1971). Después de una trilogía inolvidable, el Pincha fue destronado en su cuarta final consecutiva. En el tercer encuentro, en el estadio Nacional de Lima, los charrúas ganaron 2-0 con goles de Espárrago y Luis Artime.
Cruzeiro - River (1976). Diez años después y otra vez en un desempate en Chile, River tropieza en su intento. Los brasileños ganaron 4-1 en el juego de ida; los argentinos, 2-1 la revancha. El título se decantó sobre la hora, con un 3-2. Jairzinho, Nelinho y Dirceu Lópes, piezas claves del vencedor. El desenlace fue caótico, con golpes y expulsados: recordada por muchos como “La guerra de Chile”.
Olimpia - Boca (1979). Una histórica final, ya que hasta entonces clubes de Uruay, Brasil y la Argentina habían levantado el trofeo. Fue el turno paraguayo, bajo la tutela de Luis Cubilla, que pirvó a Boca de conquistar el tricampeonato. En Asunción fue victoria 2-0 de olimpia; el 0-0 en Buenos
silenció a la Bombonera. Nacional (Uruguay) - Newell’s (1988). La primera de las opciones que tuvieron los rosarinos para conquistar América. La formación contaba con Scoponi, Llop, Sensini, Martino y Batistuta, entre otros. Un gol de Jorge Gabrich selló el 1-0 en el Parque de la independencia; en Montevideo, Nacional logró un aplastante 3-0, con festejos de Vargas, ostolaza y De León. San Pablo - Newell’s (1992). La definición 3-2 desde el punto penal frustró a Newell’s en el Morumbí, donde cayó 1-0. El equipo que conducía Marcelo Bielsa viajó con la ventaja del 1-0 lograda en Rosario. El plantel rojinegro tenía a 23 de los 25 jugadores surgidos de sus divisiones inferiores. Once Caldas - Boca (2004). Uno de los batacazos más resonantes de la Copa Libertadores. Empates en la Bombonera (0-0) y en Manizales (11), la definición por penales vació a los xeneizes, que fallaron todos los remates ante el arquero Juan Carlos Henao, el héroe que detuvo dos de las cuatro ejecuciones.
Corinthians - Boca (2012). No hubo arrestos de la mística: sin fútbol ni reacción, Boca perdió 2-0 en San Pablo luego de igualar 1-1 en Buenos Aires. El equipo de Falcioni se derrumbó en el segundo tiempo y Emerson, la gran figura, desató el festejo. Al finalizar el encuentro, Riquelme comunicó que no continuaría en Boca. “Amo a este club, le voy a estar agradecido por siempre, pero me siento vacío y no puedo darle más”, dijo.
Gremio - Lanús (2017). En su sexta participación, Lanús se convirtió en el décimo club argentino en jugar una final. En Porto Alegre, Gremio ganó 1-0 con un gol de Cícero. En el desquite, el equipo de Almirón no logró imponer la solidez exhibida en otras definiciones ante rivales de calibre: San Lorenzo (torneo local de 2016), River (Supercopa Argentina 2017) y Racing (Copa Bicentenario 2016).