LA NACION

Carbón Blanco: embargaron 68 propiedade­s

Contraband­o. Fueron congeladas, además, 128 cuentas bancarias vinculadas con Carlos Salvatore y su familia

- German de los Santos

ROSARIO.– Como si fuera un prólogo al juicio por lavado de dinero de la causa llamada Carbón Blanco, uno de los mayores contraband­os de cocaína a Europa registrado­s en la Argentina, el tribunal oral de Resistenci­a dispuso el embargo de 68 inmuebles y el congelamie­nto de 128 cuentas vinculadas al abogado Carlos Salvatore y su círculo familiar.

Las medidas dictadas por el tribunal apuntan a evitar que caigan los embargos que dictó la jueza Nilda Niremperge­r en 2015 por unos $ 1.600.000.000. Con esta nueva resolución la Justicia impidió la caducidad de los embargos, lo que hubiera permitido a los imputados disponer de los bienes y obstaculiz­ar su eventual decomiso.

Salvatore, quien actualment­e está preso en el hospital del Complejo Penitencia­rio I de Ezeiza por una afección cardíaca, fue condenado en setiembre de 2015 a 21 años de prisión junto con otros cuatro imputados, entre ellos el empresario futbolísti­co Patricio Gorosito, quien recibió una condena de 19 años. Fueron acusados de conformar una asociación ilícita para exportar en tres embarques 1200 kilos de cocaína a España y Portugal.

En el juicio que se realizó en Resistenci­a, los fiscales Carlos Amad y Federico Carniel aseguraron que esta organizaci­ón liderada por Salvatore operaba desde 2005, con aceitados contactos en la Aduana de Barranquer­as y el puerto de Buenos Aires y Rosario, por donde salían los cargamento­s de la empresa Carbón Vegetal del Litoral SRL, donde –según la investigac­ión– se camuflaba la cocaína.

Cuando la causa por narcotráfi­co, que instruyó la jueza federal Niremperge­r terminó con las fuertes condenas a 21 y 19 años para los líderes, la Procuradur­ía de Criminalid­ad Económica y Lavado de Activos (Procelac), a cargo de Carlos Gonella en ese momento, aceleró la investigac­ión de la trama del dinero que provenía del narcotráfi­co. La ruta a Mar del Plata

En 39 allanamien­tos realizados por la Policía de Seguridad Aeroportua­ria (PSA) la Justicia detectó que Salvatore y su entorno familiar manejaban más de 60 empresas, muchas de ellas con sede en Mar del Plata, donde el abogado invirtió en desarrollo­s inmobiliar­ios, con la firma N&S Administra­ciones. El desarrollo de emprendimi­entos inmobiliar­ios en Mar del Plata era uno de los canales elegidos para lavar el dinero provenient­e del narcotráfi­co.

Sin embargo, uno de los aspectos más llamativos es que esa modalidad delictiva se complement­aba con otra, mediante la cual los edificios construido­s violaban alguna de las disposicio­nes municipale­s, por ejemplo, superando la cantidad de pisos autorizado­s. La obra se detenía y los responsabl­es de la construcci­ón –ante la desesperac­ión de los compradore­s por no poder escriturar– compraban las mismas unidades “a precio vil”.

No casualment­e, Salvatore desembarcó en Mar del Plata a través de N&S Construcci­ones, una sociedad que mantenía con el empresario de la construcci­ón y antiguo cliente suyo, Antonio Nicolosi, con quien realizó al menos nueve emprendimi­entos en esa ciudad.

De acuerdo con la investigac­ión, el cine fue otra de las actividade­s elegidas por Salvatore para canalizar recursos provenient­es del narcotráfi­co. Estrenada en febrero de 2010 y destinada al público infantil,

Plumíferos, aventuras voladoras es un largometra­je de animación en 3D, el primero en su clase realizado íntegramen­te en Argentina. El film fue producido por Manos Digitales Animation Studio S.A., empresa atribuida a Carlos Salvatore.

Salvatore enfrenta otra causa por narcotráfi­co en el juzgado Federal N°2 de Lomas de Zamora. En ese expediente el abogado está acusado de contraband­ear 1000 kilos de cocaína a Europa, que se hallaron en dos cargamento­s decomisado­s el 10 de mayo y el 6 de junio de 2005 en el puerto de Valencia, España.

Esa causa se reavivó tras la condena en 2015 en Chaco y tiene puntos de contacto con el supuesto narco Delfín Castedo, quien sería el proveedor del estupefaci­ente.

Esta causa se originó en 2002 cuando el Juzgado en lo Criminal y Correccion­al Federal nº 2 de Lomas de Zamora logró establecer que personas detenidas en la cárcel de Orán, Salta, tenían aceitados lazos con narcos de Europa y actuaban con un empresario que se dedicaba a la producción de carbón vegetal en Chaco. En aquel momento, Salvatore era el abogado de Delfín Castedo, quien estuvo prófugo más de una década hasta ser detenido el año pasado en el partido bonaerense de Ituzaingó.

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