Se frena la reunificación de la CTA
Gana fuerza el sector disidente a Micheli, que se opone al acuerdo con Yasky y Baradel
El camino hacia la reunificación de la CTA no se anticipa tan allanado como proyectaron sus referentes, Pablo Micheli (CTA Autónoma) y Hugo Yasky (CTA de los Trabajadores). Ambos dieron ya señales de abandonar sus cargos a fines de 2018, cuando se terminen sus mandatos, y hasta alumbraron al docente Roberto Baradel como el eventual sucesor en un escenario de unidad.
Sin embargo, la CTA Autónoma deberá antes regularizar su situación interna, ya que una mayoría de gremios y organizaciones sociales desconocen el liderazgo de Micheli y montaron una sede propia en Perón 3866. Lideran esa cruzada Ricardo Peidro, actual secretario adjunto, y Hugo Godoy, jefe de ATE nacional. El gremio estatal es el sector de mayor peso en el rompecabezas de la CTA, ya que es el que aporta más afiliados y el que alimenta de recursos la caja.
“La reunificación que plantean Yasky y Micheli nació muerta. Lo decidieron de manera unilateral”, dijo Godoy. Junto con Peidro, cuestionan la unidad en la acción con el triunvirato de la CGT y convocaron a un congreso de la CTA Autónoma para el 28 de abril de 2018. Dicen tener el respaldo de 17 de los 24 secretarios generales provinciales para redefinir el liderazgo y desbancar a Micheli, que contaría hoy sólo con los apoyos de Luz y Fuerza (Mar del Plata), los judiciales y el Movimiento Territorial de Liberación. Micheli adjudica la interna a un tema político por no haber apoyado al partido de Víctor De Gennaro.
Pero el problema de Micheli no sería únicamente la falta de respaldos. Por los altos costos, canceló el alquiler de la sede de la calle Lima y ahora deberá buscar un nuevo domicilio para montar su despacho. Micheli no respondió ayer las llamadas de la nacion.