En un intercambio de cartas, el Gobierno cruzó a Irán por el memorándum
Teherán reveló que uno de los objetivos era bajar las alertas y ratificó el pacto; Faurie negó su vigencia en una dura respuesta
El Gobierno salió al cruce de Irán y ratificó que el memorándum de entendimiento nunca entró en vigor. En un intercambio de cartas con su par iraní, el canciller Jorge Faurie reafirmó que nunca se cumplieron los pasos formales para su puesta en marcha.
En la nota que le escribió a Mohammad Javad Zarif hace 10 días, el ministro de Relaciones Exteriores describió que el artículo sexto del memorándum establecía que sólo tendría validez “después del intercambio de la última nota verbal informando que los requisitos internos para su aprobación o ratificación han sido cumplimentados”. La cancillería argentina fue clara en ese punto: ni la Argentina ni Irán habían efectuado esa notificación.
Además, Faurie le recordó a su colega que el pacto, por el que el juez federal Claudio Bonadio procesó con prisión preventiva a la ex presidenta Cristina Kirchner por traición a la patria, fue declarado inconstitucional por la Justicia.
Faurie respondió así a una nota que recibió un mes antes de parte del gobierno iraní. Ahí Zarif expresó que la posición de ese país era la contraria: que el memorándum de entendimiento que suscribió con la Argentina entró en vigor y aseguró que ese acuerdo implicaba el levantamiento de las alertas rojas
que Interpol emitió sobre los iraníes acusados por el atentado a la AMIA, en 1994.
“Inmediatamente después de la firma del memorándum, los entonces ministros de Exteriores de Irán y la Argentina, cumpliendo con el artículo 7 del mismo, remitieron una carta conjunta al secretario general de Interpol refiriéndose al acuerdo alcanzado entre los dos países para colaborara nivel bilateral, solicita ron a Interpol poner fin a las obligaciones de esa institución con respecto a la causa AMIA”, escribió Zarif, según la carta que dio a conocer anteayer TN.
La carta contradice la defensa de la ex presidenta y del entonces ministro de Relaciones Exteriores Héctor Timerman –detenido en su casa debido a su estado de salud–, quienes siempre negaron que uno de los objetivos del pacto con Irán fuera, justamente, el levantamiento de los pedidos de captura internacional de los cinco ciudadanos iraníes, tres de ellos ex funcionarios del régimen de Teherán, acusados por la justicia argentina de participar del atentado.
El intercambio de misivas comenzó hace un año. Faurie, en ese momento a cargo de la embajada argentina en Francia, le solicitó a pedido de la UFI AMIA a Interpol que renovara las alertas rojas, pero sin la leyenda que tenían desde 2013, en la que se hacía mención de las negociaciones entre la Argentina e Irán por resolver “el tema por medios diplomáticos”.
Incluso, tres semanas después, el 6 de enero de 2017, la Cancillería le envió otra nota a Interpol en la que reafirmaba la declaración de inconstitucionalidad sobre el pacto y la necesidad de mantener las alertas rojas sobre los acusados del atentado que dejó un saldo de 85 muertos. Además, le pidió al organismo de seguridad internacional que consultara en Teherán “acerca de la eliminación de la referencia al memorándum toda vez que el memorándum nunca entró en vigor”.
En marzo, el gobierno iraní informó que el memorándum era “válido” y que no estaba de acuerdo en remover las advertencias de las alertas, lo que en la práctica implica atenuar su efecto.
Fue entonces cuando intervino la ex canciller Susana Malcorra, que en un carta a Zarif le expresó que el pacto nunca se había puesto en marcha. Esos mismos argumentos fueron los que utilizó Faurie en el último contacto.
Por último, el canciller le escribió un mensaje a Interpol, con fecha del 10 de noviembre, en el que avisó “que la advertencia debe ser eliminada sin más trámite”. Y mientras no haya una solución definitiva, pidió que se modifique la leyenda y que se mencione “la Argentina ha comunicado a Irán su voluntad manifiesta de no llegar a ser parte del memorándum que la Justicia ha declarado inconstitucional”. Interpol aún no respondió.