El chico que tuvo desquite para despedirse de lamejorforma Destino estadounidense
Barco, de 18 años, desató el delirio de los Rojos; hoy se definiría su pase a Atlanta United
El Maracaná ardía. Iban 38 minutos de la primera etapa, Flamengo ganaba 1 a 0 y se ilusionaba, aunque la Copa Sudamericana todavía no tenía dueño. Entonces, el árbitro colombiano Wilmar Roldán cobró penal para Independiente, por una falta de Gustavo Cuéllar sobre Maximiliano Meza.
Con la irreverencia que le dan los 18 años que sólo delata su DnI, Ezequiel Barco tomó el balón y lo acomodó en el punto blanco del área. El clima era irrespirable. Pero claro, en ese infierno se sentía local.
La pelota fue a un lado (el derecho) y el arquero al otro. Fuerte y rasante. Como si hubiera pateado mil veces así. Como si definir una final internacional en suelo brasileño y en el mítico Maracaná fuese cosa de todos los días.
Cuando vio la pelota en el fondo del arco, el pibe corrió de felicidad, con una sonrisa de oreja a oreja. Tanto corrió, que terminó tirado en el césped, agotado. Extenuado de emoción.
“Estoy muy emocionado. En el penal me tenía confianza y estoy cumpliendo un sueño. Crecí en las canteras de Independiente y ahora somos campeones. ¡no lo puedo creer!”, confesó Barco ante las cámaras, instantes después del pitazo final.
Como suele ocurrir el fútbol le dio revancha al pibe surgido en las inferiores de Independiente. Porque hace seis meses, en el torneo local, tuvo en sus pies la chance de acercar a Independiente a la Copa Libertadores 2018. Sin embargo, aquel remate fue detenido por Esteban Andrada, arquero de Lanús, y con el 1 a 1 fue el Granate el que sacó el pasaje.
Las lágrimas de tristeza de aquella noche mutaron en estas, de alegría. Porque además, con el título de campeón de la Sudamericana, Independiente se clasificó al torneo continental de clubes más importante de Sudamérica.
De concretarse su venta al Atlanta United, Ezequiel Barco habrá tenido en la noche brasileña una despedida soñada: otra buena actuación, el gol del empate, con sabor a triunfo, y la vuelta olímpica.
Hoy puede ser un día clave para el futuro de Barco. Atlanta United, el equipo de la MLS que dirige Gerardo Martino, está dispuesto a pagar 16.000.000 de dólares para quedarse con el juvenil.
Mientras el mediapunta celebra en Río de Janeiro, su representante se juntará con la Comisión Directiva de los Rojos, que deberá aceptar o no el ofrecimiento del equipo estadounidense, que además le ofrecería el 10% de una futura venta.