El Teatro Cervantes apostará en 2018 por el “riesgo artístico”
El director de la sala, Alejandro Tantanian, habló del presupuesto, del cambio de público que se generó en 2017 y anticipó lo que vendrá el año próximo
Lejos del tumulto del miércoles pasado, cuando se presentó la programación del año próximo del Teatro Nacional cervantes en medio de una ciudad tomada por el caos, alejandro Tantanian, el director de la sala, recibió a en su la nacion despacho. con tono calmo y la firmeza que lo caracteriza reflexiona sobre esta experiencia de gestión: “Fue muy complicado tomar la decisión de aceptar dirigir un teatro público en un gobierno como el de cambiemos. Yo decidí hacer algo que se singularizara a lo que se podría esperar de una política cultural de este sector político. Por eso convocamos a artistas que hacía mucho tiempo que no estaban programados en un teatro público, como fue el caso de ricardo bartis; generamos una mesa de contenidos singulares que saltara cualquier grieta pensando siempre en la excelencia artística. esas cosas son las que me llevan a estar acá. Y si pienso en perspectiva, lo que arrojó este año como resultado es un indicio de que estamos haciendo un buen trabajo”.
en febrero de este año, el director y actor y cantante y dramaturgo, y tantas otras facetas artísticas, presentó la programación de esta temporada en un acto público que tuvo algo de manifiesto artísticopolítico. durante ese acto marcó los pasos a seguir de la única sala que depende del gobierno nacional. de aquel escenario al actual muchas cosas se han modificado en el cervantes en un barrido que va desde su línea curatorial hasta su forma de presentarse en sociedad pasando por su público. otras cuestiones (o, por lo menos, una) no se han modificado: la baja de su presupuesto. “Seguimos con atrasos en relación a los índices inflacionarios”, reconoce Tantanian. Si para la actual temporada el Teatro cervantes tuvo una actualización presupuestaria del 13%, para la próxima será menos del 10% (de 214 millones pasará a 233). alrededor del 20% de ese monto total es lo que queda para la producción artística. “es un presupuesto que nos va a permitir –estima– hacer menos títulos, aunque eso también tiene que ver la idea del teatro de repertorio. Si este año hicimos 33 acciones, el próximo serán alrededor de 24 o 25, a lo que habría que agregar la reposición de cuatro títulos”.
otros números pueden ayudar a hacer una evaluación del año. Según informes oficiales, durante la temporada pasada hubo 192.000 espectadores en 1119 funciones (vale aclarar que, en la sala histórica, hubo 86.700 espectadores en 584 funciones). en la actual, sea en la sala como en las cuatro obras que se presentaron en el interior, asistieron 139.900 espectadores en 651 funciones. “Lejos de querer entrar en fricción con la anterior gestión [de rubens correa], la única diferencia que hago en relación a esos números es que se revirtió la proporción entre entradas pagas e invitados. Si antes la proporción de invitados alcanzaba el 70% del total, este año lo bajamos al 30 por ciento. Y más allá de esos números, sí hubo una presencia de la institución diferente respecto de la anterior. Primero, por parte de la comunidad teatral a partir de la primera acción que hicimos, que fue Integral Pavlovsky. Luego, por parte del público”, apunta el artista devenido funcionario. en relación al público, según un análisis de audiencia, surge una señal contundente: así como disminuyó del 44 al 27% la franja de espectadores mayores de 60 años, aumentó del 15 al 21% la franja de los 18 a 25.
a principio de 2017, la falta de una ciclo de música contemporánea (como se había estado haciendo en los últimos años) despertó críticas por parte de varios integrantes de esa comunidad artística. como respuesta se hicieron cuatro fechas destinadas a la música contemporánea más la acción de cierre que tendrá lugar hoy, de las 15 a las 19.30. “Para 2018 armamos un ciclo que se llama eco de residencia investigación, experimentación y creación”, apunta. La franja vinculada con la danza contemporánea deberá seguir esperando un año más para formar parte de la línea curatorial del cervantes cuando se liberen las salas de ensayo que están usando otros cuerpos estables que depende de cultura.
entre los títulos anunciados el miércoles (ver aparte) aparece uno que protagonizará marilú marini. Lo dirigirá el mismo Tantanian (vale aclarar que, en el kilómetro cero de su gestión, ya había anticipado que algo así podía suceder). “mi trabajo de gestión está ligado a mi trabajo creativo. No hago distinción en eso. entiendo las molestias que puede llegar a ocasionar, pero entiendo que el director artístico de un teatro también debe aportar su propio trabajo. No ser un rodolfo Graziano [ex director de la sala] que dirigió muchos espectáculos en el cervantes, pero sí sumar, aportar”, señala.
entre tantas obras hay otra obra de naturaleza distinta a lo escénico: la de infraestructura con sus andamios que cubren la fachada del histórico edificio. en uno de esos andamios hay un gran cartel con una frase un tanto tajante: “Haciendo lo que hay que hacer”. Lo puso el ministerio del interior, encargado del trabajo. más allá del tono de la frase, si todo continúa según los plazos establecidos, en mayo se liberaría de andamios la fachada de Libertad y a fin de año, la fachada “estaría como debería haber estado hace mucho tiempo y no estuvo”.
a principio de su gestión habló de realizar proyectos junto al Fiba, el Teatro colón y el complejo Teatral de buenos aires. Sólo se concretó con el Fiba (se llamó 38 SM). “en el colón estamos a la espera de tener una respuesta concreta en lo que hace a la orquesta de cámara –aclara–. con el complejo sólo tuvimos una reunión a principio de este año. También es cierto que tiene que nacer de una política que piense más a nivel macro”.