Por las intensas lluvias, decretaron la emergencia en las playas de Florianópolis
En solo dos días cayeron 400 milímetros, casi el doble de las precipitaciones de todo enero; hay dos muertos y tres desaparecidos
RÍO DE JANEIRO.– Los principales balnearios del estado brasileño de Santa Catarina –destino favorito de los turistas argentinos– decretaron ayer la situación de emergencia luego de dos días de torrenciales lluvias que dejaron al menos dos personas muertas, tres desaparecidas, cientos de evacuados y a miles sin electricidad, entre varios otros estragos como inundaciones y cortes de rutas por deslizamientos de tierra.
“Por el momento no tenemos información de víctimas argentinas. Lo más grave que sucedió fue que una pareja de turistas argentinos tuvo que salir de la casa que había alquilado en Lagoa da Conceição porque en la madrugada se desmoronó el morro donde estaba la vivienda. Están bien y ya alojados en una posada”, informó a la nacion Gustavo Coppa, cónsul argentino en Florianópolis, capital de Santa Catarina y uno de los sitios más golpeados por el temporal.
Según la Secretaría de Estado de Defensa Civil local, llovieron 400 mm en las últimas 48 horas, cuando el volumen total para enero es de 190 mm. Además de Florianópolis, otras 19 ciudades catarinenses, como Balneario Camboriú, Bombinhas, Porto Belo, Itajaí, Garopaba e Itapema, fueron puestas en estado de emergencia por las copiosas lluvias.
Las muertes informadas hasta el momento fueron la de una chica de 8 años –cayó un árbol sobre el garaje de su casa donde jugaba con su hermana– y un hombre de 59, que tuvo un infarto mientras destapaba una alcantarilla. Ambos eran brasileños y vivían en Florianópolis. Las tres personas reportadas como desaparecidas son hombres, dos brasileños y el otro, un inmigrante haitiano.
Desde Navidad hasta Año Nuevo llovió todos los días en el litoral catarinense, pero a partir del último lunes las tormentas se intensificaron con fuertes vientos y numerosos deslaves que produjeron cortes en los caminos más transitados. En la isla de Santa Catarina, donde se encuentran Florianópolis, Canasvieiras, Jurerê, Lagoa da Conceição, Santo Antonio de Lisboa y Campeche, las rutas SC-401, SC-404, SC-405 y SC406 fueron bloqueadas, mientras que debió abrirse una vía alternativa para llegar al aeropuerto internacional de la isla. Al menos 12.000 viviendas quedaron sin electricidad y 485 personas fueron evacuadas.
En Florianópolis, el alcalde Gean Loureiro pidió a residentes y turistas permanecer en sus casas para evitar más tránsito y trastornos, ya que el 40% del transporte público quedó interrumpido.
“Muchos argentinos igual quisieron ir a las playas, bajo la lluvia, pero en Canasvieiras el agua estaba negra por el desborde del río de desague”, comentó a la nacion la docente Karina Olguín, de 45 años, de Villa Ballester, que junto a su marido, Mikki Del Roio, de 47, hace 10 años que veranean en Florianópolis. “Nunca había visto tanta lluvia acá. Fue terrible”, agregó.
Para estar más en contacto con los compatriotas que por estos días visitan la isla de Santa Catarina, el cónsul argentino ordenó ayer la división de la representación diplomática en dos: una parte permaneció en las oficinas del centro de la capital y otra recorrió las áreas que más turistas argentinos concentran como Jurerê, Canasvieiras, Logoinha e Ingleses. Allí se reunieron con la comisaria a cargo de la Policía Turística y con el agente de enlace de la policía de la provincia de Misiones.
Aunque no hay cifras oficiales sobre cuántos argentinos hay en Santa Catarina, las autoridades estatales y los representantes diplomáticos argentinos estiman que son muchos más del millón que llegaron el verano pasado.