Nahir cambió su testimonio y habló de un “accidente”
La joven de 19 años está acusada de asesinar a Fernando Pastorizzo
Nahir Galarza, la joven de 19 años detenida por el crimen de su exnovio Fernando Pastorizzo, amplió ayer su declaración indagatoria y aseguró que fueron “accidentales” los dos disparos con los que mató a la víctima el 29 de diciembre pasado en Gualeguaychú.
Fuentes judiciales aseguraron que la joven, quien se encuentra imputada por el delito de “homicidio doblemente agravado por el uso de arma y por la relación de pareja”, y que podría recibir una pena de prisión perpetua en un futuro juicio oral, declaró durante casi tres horas ante el juez de Garantías y Transición de Gualeguaychú, Guillermo Humberto Biré.
El abogado defensor de Galarza, Víctor Rebossio, aseguró a Télam que la joven le dijo al magistrado que los balazos con los que mató a su exnovio fueron efectuados de manera “accidental” cuando se movilizaban en la moto de la víctima.
“Nahir contó que ella y Fernando venían desde Pronunciamiento 26, que es la casa familiar de mi defendida”, explicó Rebossio, quien agregó que, además, dijo que el arma que pertenece a su padre po- licía, la había tomado Pastorizzo en la casa de la familia Galarza. La defensa apunta a demostrar que la víctima portaba la pistola.
Nahir permaneció durante casi tres horas ante el juez Biré y, luego, fue trasladada nuevamente hacia la Comisaría del Menor y la Mujer, donde permanece detenida con prisión preventiva.
A las 17, la chica, vestida con una musculosa blanca y pantalón blanco, con sus manos esposadas delante del cuerpo, abandonó en silencio y con la mirada al frente los tribunales de Gualeguaychú.
Esta nueva declaración contradice lo que ella misma había dicho durante su confesión que realizó la noche del 29 de diciembre pasado ante el fiscal del caso, Sergio Rondoni Caffa. En esa oportunidad, la chica confesó que aquel viernes del crimen, mientras circulaba en la moto de Pastorizzo, al llegar a la calle General Paz 515 extrajo de entre sus prendas una pistola calibre 9 milímetros y disparó contra su pareja, “más concretamente desde la espalda”. Y agregó: “Deje el arma en su lugar y me fui a dormir”.