Holan, un DT que también cumple el rol de negociador
La tarde de ayer se apagaba cuando Ariel Holan, molesto por la falta de refuerzos de jerarquía, levantó su teléfono y se comunicó con el presidente de Emelec, Nassib Neme, quien había decidido dar por finalizadas las negociaciones por Fernando Gaibor, después que la dirigencia de Independiente, sin autorización, cambiara las condiciones de pago establecidas en el contrato oficial. Holan, que a esa altura era un león enjaulado, reflotó las conversaciones y se convirtió en el nexo clave para que la operación por el mediocampista ecuatoriano haya quedado a un paso de concretarse. Independiente, que esta noche jugará ante Rosario Central por la 11a fecha de la Superliga, tiene hasta mañana a las 20 para avanzar por más incorporaciones.
Cuando se supo que el tesorero del club estaba de vacaciones en el medio de las negociaciones para fortalecer el plantel, un silencio de incredulidad se apoderó del vestuario del cuerpo técnico de Independiente. Holan estaba enfurecido. El malestar del entrenador creció con el paso de los días. Por eso ayer, cuando supo que se había complicado lo de Gaibor, decidió oficiar de mánager y convencer a los directivos de Emelec. El que también se sumará al plantel Rojo es Jonathan Menéndez, extremo de Talleres de Córdoba, a cambio de tres millones de dólares
La situación de Bryan Cabezas, también ecuatoriano, se definirá mañana: el contrato fue enviado ayer a Bérgamo y Atalanta analizará los detalles.
Apurado porque el tiempo apremia, Independiente le ofreció 4,2 millones de dólares a América por el 70 por ciento del pase de Silvio Romero. Los mexicanos están dispuestos a cerrar la operación en esa cifra, pero el problema pasa por el contrato del delantero, quien pretende ganar un dinero imposible para el Rojo.