LA NACION

Una crecida histórica golpea a Salta

Hay más de 10.000 afectados en los alrededore­s de Santa Victoria Este, localidad del nordeste de la provincia; se esperan más lluvias

- Juan Ignacio Gareca

El río Pilcomayo desbordó su cauce y el nordeste de Salta lo sufre. Es la mayor crecida en la última década de este río que cruza la provincia, y que ya dejó más de 10.000 afectados en los alrededore­s de la localidad de Santa Victoria Este, según informaron fuentes oficiales. “Desde 2007, estuve en todos los eventos climáticos que acontecier­on en Salta: nunca vi nada como estas inundacion­es”, dijo ayer a la nacion la ministra de Asuntos Indígenas y Desarrollo Social de la provincia, Edith Cruz. El pronóstico no es favorable: para los próximos días se esperan en la zona más lluvias.

“Esto es increíble, nunca vimos una crecida tan grande del río Pilcomayo”, dijo Daniel Ávila. El hombre vive en Santa Victoria Este, una localidad ubicada al nordeste del Chaco salteño. Su voz denota sorpresa. No puede ocultarlo por más que trabaje como locutor en la radio cooperativ­a FM Pilcomayo. Él, su familia y amigos están sufriendo la mayor inundación de los últimos años por las incesantes lluvias que empezaron el martes pasado y las consecuent­es crecidas de los ríos. Según fuentes oficiales, se trata de la mayor crecida del río Pilcomayo en la última década, y ya dejó en la zona más de 10.000 afectados, entre evacuados, autoevacua­dos y aislados. La única muerte ocurrió en Salvador Mazza, ubicada a unos 120 kilómetros de Santa Victoria Este.

Para Ávila, los trabajos de dragado, limpieza y encauce que el gobierno provincial realizó estos años sirvieron para contener las últimas temporadas de lluvia. Pero esta vez no alcanzó. “El río tiene normalment­e una cuenca de cuatro metros; con las últimas lluvias llegó casi a nueve metros”, dijo.

“Desde 2007 estuve en todos los eventos climáticos que acontecier­on en Salta: nunca vi nada como estas inundacion­es”. Las palabras son de Edith Cruz, ministra de Asuntos Indígenas y Desarrollo Social de la provincia. La comunicaci­ón con la nacion por momentos se entrecorta: las antenas de Santa Victoria Este también sufrieron el paso de las lluvias. “La mayor cantidad de evacuados son de parajes de la zona como Misión La Paz y La Bolsita”, dice la funcionari­a, quien grafica la difícil tarea de evacuar a una de las comunidade­s: “En La Curvita [un paraje que terminó sepultado por el agua] la gente no se quería ir. Eran casi 100 familias. Intentamos entrar con un tractor y nos echaron. Más tarde ingresaron las lanchas de la policía lacustre y pudieron socorrer a las peronas”.

Además de Cruz, en el lugar trabaja Daniel Russo. El subsecreta­rio de operacione­s de Protección Civil del Ministerio de Seguridad de la Nación se encarga de articular con Gendarmerí­a y el Ejército. Ambas fuerzas instalaron cocinas móviles, cisternas de agua y tiendas de campaña. “Estos días pudimos trabajar colocando las defensas en las paredes del río Pilcomayo”, dijo Russo.

La única muerte registrada hasta el momento es la de Dalma Meléndez. La mujer, de 25 años, había ido el miércoles a visitar a su madre, en el centro de Salvador Mazza, pero ella no se encontraba en el lugar. Meléndez perdió la vida luego de que la casilla de adobe donde vivía su madre se derrumbara por la embestida del alud.

El secretario de Acción Civil de Salta, Néstor Ruiz de los Llanos, explicó que la situación en Bolivia incide directamen­te en los problemas del Chaco salteño. “En los encauces de puente Aruma y Villamonte­s se acumula el agua que luego baja por nuestros ríos –dijo–. Para tratar todas las cuestiones referidas a probables desbordes del río Pilcomayo está la Comisión Trinaciona­l (con Bolivia y Paraguay) y la Binacional (solo Paraguay) para el Bermejo”.

Tanto desde el gobierno provincial como desde el nacional aseguraron que los canales de diálogo con los países limítrofes funcionan plenamente y además desmintier­on el rumor sobre la ruptura del dique Chimeo, al sur de Villamonte­s.

En Bolivia y Paraguay varias rutas y caminos quedaron inhabilita­dos luego del temporal y hubo autoevacua­dos.

Entre los albergues habilitado­s en Salta, los que más afectados recibieron son los de Aguaray, con 400 familias, y Mosconi, con más de 200. También se abrieron nuevos centros de contención en Tartagal y en las cercanías a la ruta nacional N° 54. “Más allá de los lugares dispuestos por el Estado, muchos vecinos abrieron las puertas de sus casas para recibir a personas que se quedaron sin su techo y perdieron todo”, agregó Cruz.

Respecto de los pasos a seguir, todos los funcionari­os coincidier­on en que hay que esperar y ser optimistas. “Acá los chaparrone­s cesaron un poco en las últimas horas, pero en Bolivia continúan. La naturaleza es siempre impredecib­le”, concluyó el subsecreta­rio Russo.

 ?? Javier Corbalán / el TribUno ??
Javier Corbalán / el TribUno
 ?? JaviEr corbalan/El tribuno ?? Los vecinos de Santa Victoria Este se vieron obligados a evacuar sus casas por las inundacion­es
JaviEr corbalan/El tribuno Los vecinos de Santa Victoria Este se vieron obligados a evacuar sus casas por las inundacion­es

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina