Durante 2017 las ventas crecieron 41 por ciento
En Capital Federal, las operaciones con créditos representaron 29,6 por ciento del total y aumentaron 125 por ciento respecto a 2016
Durante 2017 se efectivizaron 63.382 escrituras de compraventa de inmuebles en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que representaron un crecimiento del 40,9 por ciento interanual. El monto de las transacciones se elevó 95,9 por ciento a $148.944 millones, según informó el Colegio de Escribanos porteño.
La cantidad de escrituras de diciembre último fue de 7850 y el monto fue por $20.022 millones. El aumento de la cantidad, comparado con el año anterior, fue de 26,4 por ciento y si se compara el monto, la suba fue de 57,6 por ciento. Además, las escrituras formalizadas con hipoteca bancaria totalizaron 2326 casos, un incremento del 125,2 por ciento respecto del año anterior. Esto representa un 8,5 por ciento en comparación con el mes pasado y el 29,6 por ciento del total.
En cuanto a las transacciones, en relación con noviembre de 2017 los actos subieron 16 por ciento en cantidad y aumentaron 21,5 por ciento en pesos. El monto medio de los actos fue de $2.550.583, una cifra que representa una suba anual de 24,7 por ciento en pesos, mientras que en moneda estadounidense el incremento fue de 11,2 por ciento.
José rozados, director de reporte inmobiliario destaca que este año es el mejor después del 2011 y se explica básicamente por el movimiento de los créditos hipotecarios. “Este año va a ser todavía mejor y con el crédito está cada vez más afianzada la posibilidad de comprar una propiedad. Además los bancos están alineando sus estructuras internas para el otorgamiento de los créditos”, afirma.
Asimismo, recordó que 2007 fue un récord en cantidad de escrituras –hubo 73.577– y pronóstico que si la tendencia en alza se mantiene, ese índice récord se podría superar. “Puede pasar en la medida en que los bancos no endurezcan las condiciones, los salarios se adecuen a la inflación y al costo de vida”, sostiene.
Por su parte, el desarrollador Gonzalo monarca analiza que el volumen de créditos de viviendas operó principalmente en el mercado del usado, dirigido al sector medio, para espacios de 50 metros cuadrados con uno o dos dormitorios, generalmente para jóvenes sin familia. Aunque advirtió que la amplia demanda de créditos genera una caída en la oferta para las ventas de crédito hipotecario.
“Lo que pasó es que la pocas unidades del mercado las compró la gente que pudo acceder a los créditos. Ahora hay que desarrollar nuevos productos, que deben ser accesibles para una primera vivienda, es decir de valores de hasta US$150.000. Esto puede generar dos cosas: que la gente busque viviendas de pozo, unidades que hay que esperar para la entrega y lo segunda es que los bancos den créditos intermedios con más velocidad para que el consumidor tenga más rápido el producto”, explica.
Jorge D’ Odorico, director de la inmobiliaria que lleva su nombre consideró que la demanda se va a sostener porque frente a los alquileres porque la gente prefiere pagar una cuota que le permita acceder a un techo propio.
“Durante enero, atípicamente, el mercado siguió activo. Si bien los precios siguen consolidados, es cierto que la oferta disminuye y la demanda se está dirigiendo hacia unidades más grandes de dos, tres o cuatro ambientes”. Además, aclara que todavía hay stock, pero que si la tendencia alcista continúa, “va a llegar un momento en que se puede agotar y ahí hay que esperar a que haya mayor desarrollo”, relata y agrega que “hoy las entidades privadas están teniendo mayor protagonismo como nuevos
players en el mercado como entes crediticios. De un portfolio de 20 operaciones, 60 por ciento son de bancos oficiales”, detalla. Desde re/max, cuantificaron que entre 80 y 90 por ciento de las reservas se toman con créditos y señalaron que ante la excesiva demanda, se generó un aumento de los precios de los inmuebles. “La oferta se está reduciendo, eso aumenta las posibilidades de que los valores sigan subiendo, aunque eso depende de las zonas”, finalizan.