Los demócratas refutarán el memo que protege a Trump del Rusiagate
La publicación del informe del Comité de Inteligencia de la Cámara baja debe ser autorizada por el presidente
WASHINGTON (De nuestro corresponsal).– La encarnizada pelea en Washington para defender o ensuciar la reputación de la investigación del Rusiagate no ha terminado. Tras la publicación de un polémico memo republicano que acusó al FBI de abusar de sus poderes con fines políticos para dañar a Donald Trump, los demócratas quedaron, ayer, más cerca de lanzar su contraataque con otro memo.
El Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes –que preside el demócrata Adam Schiff– votó desclasificar un memo escrito por la oposición que refuta el llamado “Memo Nunes”, un documento de seis páginas que Trump y sus seguidores han utilizado para denunciar un pacto entre los demócratas y el FBI para perjudicar al presidente.
El “Memo Nunes” alega que el FBI utilizó información falsa contra Trump, entregada por los demócratas, para avanzar en la investigación del Rusiagate, que intenta determinar hasta dónde llegó la mano del presidente Vladimir Putin en la última elección presidencial, incluido si hubo un pacto con la campaña del magnate. El memo fue recibido con críticas, apatía o escepticismo por los críticos del presidente y expertos en seguridad nacional, e incluso fue minimizado por algunos republicanos. Pero Trump, que siempre ha negado cualquier intento de colusión con el kremlin, dijo que se sintió “vindicado”.
Ahora, el mandatario deberá decidir si permite la desclasificación del memo demócrata, desatando el estilo de pelea mediática y política con la cual el presidente parece sentirse cómodo. Antes de la votación, Trump cargó contra Schiff.
“El Pequeño Adam Schiff, quien está desesperado por postularse para un cargo más alto, es uno de los mayores mentirosos y perdedores en Washington”, escribió.
“Adam, deja las audiencias cerradas del comité para filtrar ilegalmente información confidencial ilegalmente. ¡Debe ser detenido!”, continuó el jefe de la Casa Blanca.
Schiff no dudó en responder por la misma vía. “En lugar de tuitear calumnias, el pueblo estadounidense apreciaría que usted apagara la TV y ayudara a resolver la crisis de fondos, proteger a los dreamers o... la verdad, todo”, indicó el legislador.
El “Memo Nunes” acusa a la cúpula del Departamento de Justicia y del FBI de haber solicitado una orden de espionaje contra Carter Page, exasesor de política exterior de Trump, sustentada en el llamado “Steele Dossier”, una investigación de un exespía británico sobre los lazos de Trump con Rusia pagada por la campaña de Hillary Clinton y los demócratas.
Trump y sus seguidores aducen que la investigación está politizada por que está basada en el “Steele Dossier”, que nunca fue verificado. Pero el memo también reconoce que el puntapié de la pesquisa fue George Papadopoulos, asesor de política exterior durante la campaña de Trump, a quien el círculo del magnate intenta ningunear llamándolo “el muchacho del café”.
Papadopoulos, según The New York Times, reveló sin querer a un diplomático que la campaña de Trump tenía información dañina sobre Clinton, lo que disparó toda la investigación.
Schiff sugirió ayer que las críticas que recibió el memo republicano ayudaron a hacer avanzar la desclasificación del memo demócrata. Los republicanos, dijo, quedaron mal parados al lanzar “un memorando engañoso” y negarse a publicar la respuesta de la oposición.
Esa decisión quedó ahora en manos de Trump, quien tendrá cinco días para decidir si libera o no el documento.