La sequía marcó el primer remate de Rosgan en 2018
La escasez de pasturas, producto del déficit hídrico en zonas rurales, sumó oferta, pero restringió las decisiones de compra
Entre el miércoles y anteayer, Rosgan concretó su primer remate de 2018, con una oferta que superó las 23.700 cabezas de invernada y cría. Más allá de que en general los precios evidenciaron leves bajas respecto de la última subasta de 2017, el principal condicionante fue la sequía que afecta amplias zonas de producción de la Argentina. Así lo señaló el director Ejecutivo de la entidad, Raúl Milano, al sostener que la ausencia de lluvias en las principales regiones ganaderas del país durante los últimos meses encendió una luz de alerta en toda la cadena productiva.
“Si bien la mayor parte de las regiones criadoras del país raramente son agrícolas, en los lugares relativamente mixtos el impacto de la sequía aceleró decisiones. Ante el faltante de pasto en el campo y la situación compleja del maíz y de la soja, que no están teniendo un buen ciclo, muchos productores incrementaron los volúmenes consignados ”, explicó Mil ano. Y Añadió: “Lo que el productor tiene a mano para hacer caja frente a la seca es la vaca y allí aparece la mayor oferta de las zonas mixtas”.
En materia de precios, el promedio obtenido para los terneros fue de $41,80 pesos por kilo, frente a los $41,85 del último remate de diciembre; para las terneras, de $40,26, frente a los $41,88 precedentes, y para los lotes mixtos, de $42,05 respecto de los $42,83 de diciembre pasado. “Ante una oferta tan importante la pregunta que nos surgió fue si la demanda estaría dispuesta a comprar más, teniendo en cuenta que recién en las últimas semanas se recuperó el valor de la hacienda en Liniers. Y, en efecto, la demanda existió, pero con características muy diferenciadas. La ternerada se colocó en forma ágil, así como las vaquillonas de 1 a 2 años. Entre los novillos, se notó que a medida que pasaba de 1 a 2 años, de 2 a 3 y a más de 3 años, la demanda se reducía y, en proporción, se vendía mejor lo más nuevo. Hubo buena colocación para las vacas de invernada y para las vacas con cría al pie, pero, como siempre, la vaca con garantía de preñez fue de difícil colocación”.
Los siguientes son los promedios obtenidos: terneros, $41,80; terneras, $40,26; terneros y terneras, $42,05; novillos de 1 a 2 años, $36,21; novillos de 2 a 3 años, $31,55; novillos de más de 3 años, $30,40; terneros Holando, $34,48; novillos Holando, $30,20; vaquillonas de 1 a 2 años, $33,79; vaquillonas de 2 a 3 años, $33,10; vacas con cría al pie, $6514,24; vacas con garantía de preñez, $9225,08, y vacas de invernada, $20,50.
A modo de síntesis, Milano dijo que la sequía fue la gran actora del inicio de la zafra, “porque sumó oferta, pero restringió las decisiones de compra. Los principales compradores del corazón de la invernada fueron los feedloteros, que mostraron su interés ante las mejores perspectivas de precios del gordo, que equilibran un poco los resultados. En cambio, se notó una menor presencia de los invernadores tradicionales por su escasez de pasto”.
En su análisis de las expectativas de Rosgan para 2018, Milano dijo a la nacion que en el año de su décimo aniversario la entidad tiene por objetivo “crecer un 10% en volumen operado, como resultado de una mayor oferta de animales y de haber consolidado una importante cantidad de remates especiales a lo largo del año y en diversos puntos del país. Asimismo, se buscará mejorar las plataformas operativas del mercado con la incorporación de tecnología y con nuevas herramientas comerciales”.
Añadió que la política de incorporación de operadores se mantendrá, buscando acentuar la presencia en espacios territoriales donde exista mayor posibilidad de desarrollo. “Hoy podemos confirmar que la firma consignataria Colombo y Colombo es nueva accionista de Rosgan”, dijo Milano y explicó que ingresó como membresía a fines de 2017 y que en el reciente remate se firmó su ingreso como accionista.
Sobre la perspectiva para la cadena de ganados y carnes, el ejecutivo explicó que 2018 será un muy buen año, “por la gran demanda internacional que elevará nuestros volúmenes de exportación que, además, será complementada por el mercado interno, que seguirá traccionado por un consumo importante, que augura mejores valores para la hacienda en general. La suma de las demandas interna y externa preanuncia un mercado activo para la mayoría de las categorías del gordo”, aseguró Milano.