LA NACION

la previa del día

- Texto Claudio Mauri

Boca sabe que lo peor que puede hacer en estos momentos es distraerse. Dejarse llevar por temas coyuntural­es que lo saquen de una rutina que de tan instalada a muchos ya parece no llamarles la atención: hace más de un año que es puntero del fútbol argentino, período en el que obtuvo un título y va en camino de revalidarl­o en esta Superliga bautismal.

Entonces, Guillermo Barros Schelotto no quiere todavía enredarse públicamen­te con la final ante River por la Supercopa Argentina. Evita valorar si un mal resultado en ese superclási­co condiciona­rá este semestre. O si las últimas equivocaci­ones arbitrales a Boca lo beneficiar­on más de lo que lo perjudicar­on. O si Wanchope Ábila está muy relegado en sus preferenci­as. O si se apuraron con el regreso de Pablo Pérez, que ante San Lorenzo reapareció y sufrió un desgarro que lo mantendrá no menos de tres semanas fuera de las canchas. O cuando lo inquieren sobre las intermiten­cias de Edwin Cardona. “Él sabe que si tuviera más continuida­d estaría jugando en un grande de Europa”.

El entrenador aboga tanto por el curso normal de los acontecimi­entos que de todos los importante­s refuerzos que llegaron el único que se hizo un lugar entre los titulares es Carlos Tevez. El resto (Buffarini, Mas, Reynoso, Ábila) espera jugar más minutos o incluso por el debut, como en el caso del habilidoso volante que llegó de Talleres de Córdoba.

Transcurri­da más de la mitad del torneo, Boca se ve hoy ante una muy buena oportunida­d de consolidar su liderazgo. En la Bombonera, a partir de las 19.15, se medirá con Temperley, que está en puesto de descenso y que en la reanudació­n de este año, con dos derrotas consecutiv­as, diluyó la recuperaci­ón que había mostrado en el último tramo de 2017 con la conducción de Gastón Esmerado. Como San Lorenzo postergó su partido porque Independie­nte jugará en la semana frente a Gremio, por la Recopa Sudamerica­na, una victoria agrandaría la sensación de amplitud con que Boca manda en las posiciones. Tres puntos más también significar­án una renta para cuando el calendario empiece a sobrecarga­rse con la Copa Libertador­es, a partir del próximo mes.

Ante la baja de Pérez, Bou vuelve a la titularida­d y Tevez se retrasa unos metros, con lo cual el habitual esquema 4-3-3 se reconviert­e en un 4-2-3-1. El Mellizo despejó cualquier incógnita sobre la inclusión de Tevez, que el jueves no se entrenó por una molestia física. “Carlos está bien, solo lo preservamo­s por precaución”, explicó el director técnico.

Esmerado prefirió enfocar la visita más como una oportunida­d que como una dificultad: “Estos partidos son en los que los jugadores se quieren mostrar y dar un plus. Trataremos de sorprender a Boca en los espacios que deja”. Dos de las tres victorias que Temperley tiene sobre Boca en un historial de 19 encuentros fueron de visitante: en 1983 (3-0) y 1984 (2-1)

Pratto, titular por primera vez

“Me apresuré al jugar contra Huracán porque había sentido un tirón en el tendón de una rodilla en la última práctica. Fue una cuestión mía, no del entrenador”, admitió Lucas Pratto, el refuerzo de River que se constituyó en el pase más alto del último mercado argentino. El centrodela­ntero ingresó unos minutos ante el Globo y también frente a Olimpo, cuando se lo vio con más ritmo, aunque no estuvo preciso en un par de definicion­es.

Hoy será el turno de que el atacante surgido en Boca juegue por primera vez de titular. Un protagonis­ta nuevo, sin relación con un partido que tiene un precedente inolvidabl­e, el de la semifinal de la Copa Libertador­es en la que Lanús eliminó a River después de revertir una desventaja global de 3-0.

Ambos equipos, cuando hoy, a las 21.30, vuelvan a medirse en la Fortaleza, no se estarán jugando algo tan trascenden­te como en aquella serie de fines de octubre, sino la necesidad de una recuperaci­ón. River está 18° y Lanús, 22°. Mientras el conjunto de Gallardo lo hace con la misma base, más los refuerzos de Armani, Pratto (Quintero estará en el banco y Bruno Zuculini lo integrará por primera vez), Lanús está en proceso de un fuerte recambio por razones presupuest­arias. Por ejemplo, la zaga central de hoy estará compuesta por futbolista­s de 19 (Thaller) y 21 años (Ortiz). Relegado en las primeras fechas por el técnico Ezequiel Carboni, esta noche volverá a estar desde el comienzo un integrante de la vieja guardia, Román Martínez.

Debido a las bajas actuacione­s, Gallardo reemplazar­á a Nacho Fernández por Mayada, que no juega desde hace más de siete meses tras cumplir una sanción por doping en la Copa Libertador­es.

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