La pulseada por las licencias de los maestros también es por dinero
El gobierno bonaerense gastó unos $19.000 millones para cubrir los cargos vacantes
LA PLATA.– El ausentismo docente en la provincia de Buenos Aires alcanza actualmente el 17 por ciento de los 287.253 maestros que trabajan frente a 4,5 millones de alumnos en 18.000 escuelas.
María Eugenia Vidal quiere limitar las licencias de los docentes de la provincia de Buenos Aires, para mejorar el sueldo de los maestros que no faltan a dar clases. La discusión no se trata solo de calidad educativa, sino también de dinero.
“Queremos discutir en serio el tema ausentismo”, dijo a la nacion el ministro de Trabajo Marcelo Villegas.
El Poder Ejecutivo se apoya en cifras para dar esta discusión resistida por los sindicatos: el 40 por ciento de los chicos de primaria tuvieron más de dos maestros el último año.
Por si fuera poco: el 20 por ciento de los niños rotó hasta tres veces de maestro, a causa de las li- cencias que se pueden pedir los docentes amparados por la ley 10.579.
Se pidieron 105.000 licencias médicas por mes, en promedio, en 2017. Hubo 117.000 suplencias, mensuales. Hay casos de docentes que en 40 días presentaron 7 patologías diferentes. Pero además 120 docentes pidieron licencia un día después de ser designados en un cargo superior.
Presupuesto
¿Cuántos recursos aparecen detrás del problema? El gobierno gastó en suplencias unos 19.000 millones de pesos al año.
Hasta ahora hay 12.500 millones de pesos de diferencia entre el techo de la oferta que puede hacer el gobierno de María Eugenia Vidal y el piso de la suba salarial que exigen los sindicatos docentes.
El gobierno de Vidal tiene instrucciones del presidente Mauricio Macri de no volver a instrumentar la cláusula que ajusta salarios según la inflación. Y de atenerse a la expectativa inflacionaria del 15 por ciento.
Los docentes exigen 20 por ciento y cláusula gatillo. Existe una sola manera de reducir esta brecha entre unos y otros, según fuentes ligadas al gobierno, una sola manera de ahorrar unos diez mil millones de pesos, que hoy se “dilapidan” en el presupuesto y que podrían ir al bolsillo de los maestros: reducir a la mitad el ausentismo.
Redireccionar esos 19.000 millones de pesos que hoy se destinan a cubrir licencias médicas, según se insiste cerca de la gobernadora.
En caso de que estas ausencias se reduzcan a la mitad, el gobierno podría disponer de diez mil millones para entregar al bolsillo de los docentes cumplidores.
La fórmula podía ser: revisión trimestral de las planillas de ausentismo y un depósito a los maestros cumplidores acorde a la baja en el ausentismo.
Esa es la única alternativa que visualiza el gobierno para destrabar el conflicto que hoy parece un callejón sin salida, a veinte días del ciclo lectivo, programado para el 5 de marzo. l gobierno ya hizo una oferta del 15 por ciento a pagar en tres cuotas y 4500 pesos de remuneración para quienes tuvieron asistencia perfecta en 2017.