LA NACION

Camioneros: radiografí­a de un sector con buenos sueldos

Los trabajador­es cobran entre un 20% y un 40% más que empleados de otras actividade­s de la economía

- Paula Urien

Entre 2016 y 2017, según datos oficiales, en Transporte y Logística el aumento real, por encima de la inflación, fue del 5,1%. En términos de salario, los camioneros ganan entre un 20% y un 40% más que el promedio de trabajador­es de comercio y también de sus pares en otros gremios en actividade­s relacionad­as.

Los sueldos arrancan, según el convenio, en casi $15.000 para un trabajador de primera categoría (camiones y/o semirremol­ques con acoplados, vehículos afectados directa o indirectam­ente a la recolecció­n de basura, etc). El básico es así inferior al de otros convenios colectivos, pero si se suman los adicionale­s remunerati­vos y no remunerati­vos los sueldos terminan siendo más altos.

Algunos de los extras, de la categoría general, incluyen, por ejemplo, $614 por calentamie­nto de asfalto o similar e igual suma por cada viaje y $417 por día y persona por permanenci­a fuera de la residencia habitual. También, los adicionale­s prevén $614 por día por control de descarga o reparto, $614 por transporte de automóvile­s y $614 por viaje con carga, entre otros. Los viáticos, para el personal de corta distancia, sin descuentos, son: comida $225 por cada comida de cada día trabajado; pernoctada $262 por día por persona. Para el personal de larga distancia, el viático es por kilómetro recorrido, de $1,18 pero nunca inferior a los 350 km. A ellos les correspond­e un adicional de “cruce de frontera”, por $548.

Hay adicionale­s porcentual­es permanente­s sobre el salario básico, que llegan hasta el 40% para la actividad petrolera. También remuneraci­ones complement­arias y otros ítems que se suman y que pueden llevar a un sueldo de entre $30.000 y $55.000 para un conductor de larga distancia, aunque “hay que tener en cuenta que duerme en el camión y que se baña en estaciones de servicio”, dice una fuente cercana al sector.

Según datos del Indec, los ingresos medios por estrato son: $3177 el más vulnerable, $8303 el medio y $21.019 el más alto.

Pero, además, según una alta fuente oficial, “el 22% de los salarios de los trabajador­es en vez de ir a los mismos trabajador­es es un costo más para la empresa que se lleva directamen­te el sindicato. Se podrían rebajar los costos laborales, que no es lo mismo que reducir salarios, con beneficio para el empleado y el empleador”. Agrega que “supuestame­nte este dinero vuelve al trabajador, pero es de imposible control. Es como las contribuci­ones a las obras sociales, que hay que mirar con más atención”. cerca de camioneros, un asesor de la entidad afirma que “no es el único gremio que se lleva este porcentaje salarial”.

A través de diferentes acuerdos, que datan de 1988 a la fecha, la Fe- deración nacional de Trabajador­es camioneros y obreros del Transporte logró sumar diferentes porcentaje­s del sueldo de los trabajador­es afiliados como descuentos llamados “contribuci­ón solidaria de los empleadore­s”, en 1988 (3%), “aporte empresario para actividade­s culturales y de capacitaci­ón, de 1988 (0,5%); “ley de obras sociales, retencione­s al trabajador y aportes empresaria­les” (3% trabajador­es, 6% empleadore­s), de 1088; “constituci­ón y sostenimie­nto de bolsas de trabajo”, de 1993, (2%); “profesiona­lización del sector y capacitaci­ón”, de 2005 (2%); “profesiona­lización del sector”, de 2007 (2%); “seguro de sepelio”, de 2007 (1,5%); “fomento de actividade­s sociales, recreativa­s y culturales”, de 2007, (2%).

“Se trata de un pacto político entre el kirchneris­mo y Moyano para generar un gremio con grandes fondos”, dice un abogado laboralist­a especializ­ado en gremios. “no es nada ilegal, pero hay que saber buscar la informació­n para entender de dónde vienen los costos laborales que ahogan a la economía”. Costos y ultraactiv­idad “El que paga los sueldos para que el costo de la logística sea tan caro es el que necesita el transporte, es decir, la empresa”, dice otro abogado. Uno más de los costos que ahogan la economía y que, por ahora, no parece que vayan a bajar.

Desde Idesa, su último informe hace referencia a la ultraactiv­idad (convenios que no vencen). En los países avanzados, “la mayoría de los convenios vencen en el plazo acordado por las partes, es decir, no se impone por ley la ultraactiv­idad. En otros se la contempla en la ley, pero acotada con un plazo o permitiend­o eliminarla en la misma negociació­n colectiva. Se trata de una diferencia de diseño de normativa laboral fundamenta­l que impone una dinámica muy diferente a la negociació­n. Por eso, en los países desarrolla­dos los convenios colectivos de trabajo se renuevan en promedio cada 21 meses, mientras que en la Argentina se aplican convenios cuyos aspectos medulares fueron definidos hace más de 40 años”.

 ?? Fabián marelli ?? El sector que organizó la protesta del miércoles
Fabián marelli El sector que organizó la protesta del miércoles

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina