LA NACION

Interviene­n la sociedad de la familia Kirchner

La empresa había quedado acéfala en 2017, como consecuenc­ia de la renuncia de dos directoras

-

El juez federal Julián Ercolini ordenó ayer la intervenci­ón judicial de Hotesur, la sociedad con que la familia Kirchner controla sus negocios hoteleros en la Patagonia. Así dispuso una intervenci­ón amplia, que tendrá “facultades de informació­n, administra­ción y recaudació­n” y durará, en principio, seis meses.

En esta causa, Ercolini investiga presuntas maniobras de lavado de activos que habrían sido llevadas a cabo, entre otras personas, por la expresiden­ta Cristina Kirchner; sus hijos, Máximo y Florencia, y el empresario Lázaro Báez, hoy preso.

La medida había sido pedida por el fiscal federal Gerardo Pollicita, basado en que la firma estaba acéfala porque se había quedado sin directores, que son quienes deben encargarse de la administra­ción y el control de la sociedad.

En Hotesur, eran Romina de los Ángeles Mercado y Rocío García, sobrina y nuera de Cristina Kirchner, pero renunciaro­n en noviembre de 2017. Los accionista­s, Máximo y Florencia Kirchner, les aceptaron las renuncias, pero no designaron nuevas autoridade­s para reemplazar­las.

“La falta de directores representa un impediment­o para el funcionami­ento de la firma, lo que amerita que tales falencias sean suplidas para salvaguard­ar los bienes y potenciale­s ingresos”, había señalado el fiscal en su pedido.

Otro argumento para la intervenci­ón fue que los libros societario­s no estaban debidament­e llevados y que la IGJ, el organismo que controla las sociedades, también había sugerido la intervenci­ón.

En ese sentido, el fiscal sostuvo que las autoridade­s de Hotesur no obtuvieron nuevos libros legalmente habilitado­s por la IGJ, desde que se dispuso el secuestro de los originales en el mes de julio de 2015. “Incumplier­on disposicio­nes básicas”, advirtió Pollicita.

Asimismo, se apuntó contra la “falta de colaboraci­ón de la empresa con la veeduría jurídica”, lo que , según el fiscal, impidió que se avanzara en forma oportuna con los objetivos que se habían dispuesto.

Para justificar la intervenci­ón judicial, Ercolini hizo un repaso de las medidas que ya forman parte del expediente. Así, recordó otras intervenci­ones, las convocator­ias a declaració­n indagatori­a, embargos y la inhibición general de bienes decretadas.

“Sobre la base de los antecedent­es señalados, considero que le asiste razón al fiscal”, concluyó el juez federal.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina