Remedios: el PAMI sube la presión para cerrar el acuerdo
Intimó a los laboratorios a que respondan sin demora
No hay tregua. Cuando parecía que el PAMI y los laboratorios llegarían a un nuevo acuerdo para modificar el actual modelo de compra de medicamentos, la negociación quedó paralizada y lejos de una resolución. Ante este escenario, el Gobierno decidió subir la presión e intimó a las tres cámaras que representan a las empresas para que en un plazo de 36 horas respondan si aceptan la oferta de la obra social.
Según la propuesta que el PAMI les envió a Cilfa y a Cooperala, los representantes de los laboratorios nacionales, y a Caeme, multinacionales, las empresas deberán bajar un cinco por ciento el valor de los remedios; no habrá más acuerdos cartelizados, sino que serán tratos individuales con los laboratorios y, lo más importante, se fijará un techo de precio.
Este último punto es el único que los laboratorios no están dispuestos a suscribir. Hoy esta diferencia es insalvable y el convenio, que finaliza el 31, se encamina a concluir sin renovación. Según datos oficiales, el cambio representaría un 20% de ahorro por año para el PAMI, unos 6500 millones de pesos.
Con el nuevo convenio, el director ejecutivo de la obra social más grande de América Latina, Sergio Cassinotti, quiere recuperar la centralidad en la toma de decisiones. La disputa principal surge de la imposición de los precios máximos por droga, cuyo análisis y definición serán potestad del PAMI, según el nuevo convenio. Según la carta documento que el PAMI les envió ayer a los laboratorios, a partir del 1º de abril se debería aplicar una rebaja de 5% al precio de los medicamentos al 28 de febrero último.
Para las empresas, este punto está fuera de la negociación. La razón es simple: el precio ponderado del PAMI se trasformaría en el precio de referencia para el resto de los compradores. Un ejemplo de lo que podría representar para la industria fue lo que ocurrió la última semana cuando, en plena negociación con los laboratorios, el Gobierno logró quebrar la resistencia de las empresas a la hora de fijar los precios de los medicamentos. En la primera licitación pública –se trató de la compra de medicamentos para la hemofilia– con el nuevo modelo que busca imponer la Casa Rosada, se alcanzó un descuento del 80%. ¿Cómo lo logró? En lugar de realizar la compra por separado, el Ministerio de Salud, el PAMI, IOMA y otras obras sociales decidieron ir juntos. Con este método el Estado se ahorrará 1500 millones de pesos por año.
La notificación del PAMI tiene vencimiento. Si los laboratorios no responden “antes de las 10 horas del día 21 de marzo en forma sencilla, clara, fehaciente y detallada que aceptan los términos detallados, el silencio será considerado por el instituto aceptación lisa y llana de la totalidad de los puntos detallados en la propuesta”.