Otro ataque químico ahonda el horror sirio
Activistas culparon al gobierno del bombardeo en Ghouta Oriental; Trump trató de “animal” al presidente sirio, y acusó a Irán y a Rusia de respaldarlo
DAMASCO (AP).– Familias enteras muertas, civiles afectados por desmayos y bebés con convulsiones. Las imágenes de un ataque químico en Ghouta Oriental perpetrado, según activistas, por el régimen de Bashar al-Assad, reveló una vez más el horror de la guerra en Siria. Entre 40 y 150 personas murieron por el bombardeo, que provocó una dura respuesta de Donald Trump. “Pagará un precio alto”, advirtió en Twitter.
DAMASCO.– Las imágenes de los civiles afectados por desmayos, convulsiones y espuma en la boca revelaron al mundo una vez más el horror de la guerra en Siria. Activistas denunciaron un ataque químico orquestado por el gobierno de Bashar al-Assad en las afueras de Damasco, que dejó por lo menos 40 muertos, aunque algunas organizaciones temen que el número de víctimas supere las 150.
El presunto bombardeo provocó una ola de protestas internacionales, entre ellas la del presidente norteamericano, Donald Trump, que trató de “animal” al presidente Bashar al-Assad por este “ataque insensato”.
Sin embargo, el gobierno de Al-Assad y su aliado ruso desmintieron el ataque en la ciudad de Duma, en Ghouta Oriental, último bastión rebelde cerca de Damasco que el régimen está a punto de reconquistar en su totalidad.
“Presidente Putin, Rusia e Irán son responsables por apoyar al animal Al-Assad. Alto precio a pagar”, afirmó Trump en Twitter.
El supuesto ataque se produce casi exactamente un año después de que se registrara un ataque químico en la localidad de Khan Sheikhoun, en el norte de Siria, en el que murieron docenas de personas. El incidente provocó que Trump ordenara un ataque con varias decenas de misiles Tomahawk contra una base siria. Trump dijo que el ataque tenía el objetivo de disuadir a Siria de volver a utilizar armas ilegales.
Por una iniciativa de Francia, nueve países solicitaron una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU hoy.
Los Cascos Blancos, los socorristas que operan en las zonas rebeldes en Siria, un grupo insurgente así co- mo la oposición en el exilio acusaron al régimen de realizar el ataque con armas químicas.
En un comunicado conjunto, los Cascos Blancos y la organización no gubernamental SAMS (Syrian American Medical Society) afirman que 48 personas murieron en este ataque con “gas tóxico”. También dieron cuenta de “más de 500 casos, en su mayoría de mujeres y chicos que presentan síntomas de una exposición a un agente químico”.
Un video difundido por los Cascos Blancos en Twitter muestra una maraña de cuerpos sin vida, incluidos los de mujeres y chicos, con espuma blanca saliendo de sus bocas.
Firas a-Dumi, socorrista en Duma, habló de “escenas espantosas”. “Había muchas personas sofocándose, algunas murieron inmediatamente”, dijo. “Era una masacre. Había un olor muy fuerte que provocó dificultades respiratorias en los socorristas”, agregó.
Fue imposible confirmar estas informaciones por fuentes independientes. El régimen calificó estas acusaciones de “farsa” y “fabricaciones”. Moscú desmintió con firmeza estas informaciones. Irán, otro aliado del gobierno sirio, consideró que estas acusaciones son un nuevo “complot”.
Por su parte, Gran Bretaña estimó que “de confirmarse que el régimen utilizó otra vez armas químicas, será un nuevo ejemplo de la brutalidad de Al-Assad”.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, dijo estar “particularmente alarmado” por el presunto uso de gas.
La Unión Europea (UE) afirmó, a través del Servicio Europeo de Acción Exterior, que hay “indicios” de que el régimen sirio llevó a cabo un ataque químico en Duma, e instó a Rusia e Irán a evitar otro ataque.
Avance
El régimen sirio, que recibe un fuerte apoyo de Rusia, controla más de la mitad de Siria, país desgarrado por una guerra que dejó más de 350.000 muertos en siete años.
En Ghouta Oriental, luego de lanzar el 18 de febrero una campaña de bombardeos acompañada por operaciones terrestres, el régimen logró reconquistar más del 95% del territorio.
Los bombardeos y los acuerdos de evacuación de combatientes y civiles impulsados por Rusia, permitieron consolidar su presencia en la región.
Tras el fracaso de las negociaciones con un último grupo rebelde, Jaish al-Islam atrincherado en Duma, las fuerzas del régimen reanudaron el jueves los bombardeos y las operaciones, que habían cesado hace unos diez días.
Ayer por la tarde, sin embargo, Damasco parecía haber llegado a un pacto. Según la agencia oficial SANA se alcanzó un acuerdo para evacuar a los rebeldes de Duma.
En la campaña de Ghouta Oriental murieron unos 1600 civiles. Los acuerdos de esta región permitieron la evacuación de 46.000 personas.