Satisfacción de Macri por la carta que le envió Francisco
Lo animó a “seguir trabajando por el bien” del país y a construir el futuro “con el aporte de todos”
El gobierno de Mauricio Macri recibió ayer otra señal de descongelamiento en la fría relación con el Vaticano. El papa Francisco le respondió personalmente al Presidente una carta anterior con un mensaje cordial y amistoso: lo animó a “seguir trabajando en su alta misión al servicio del bien de esa Nación”, por la unidad y para “superar los conflictos”.
En tono cálido y conciliador, Francisco lo despidió con palabras de pastor. “Le aseguro mi oración por usted, su familia y por todo el querido pueblo argentino, que llevo en mi corazón”, escribió.
Remató con un guiño religioso: “Le pido, por favor, que no se olvide de rezar por mí. Que el Señor los bendiga y la Virgen Santa los cuide”.
Pese a que este descongelamiento epistolar podría ser parte de una suma de gestos para destrabar un posible viaje de Francisco al país, cerca del Papa y de Macri desestimaron ante la nacion tal expectativa. “No creen falsas ilusiones. Ya dijo que no. Fue mensaje positivo”, dijeron en Roma.
La misiva papal sorprendió a la Cancillería y a la Casa Rosada. En rigor, respondió a una carta que Macri le había enviado al Santo Padre el 13 de marzo para saludarlo por los cinco años de su papado. Sin embargo, el Presidente; el canciller, Jorge Faurie, y el secretario de Culto, Santiago de Estrada, consideraban que Francisco ya le había respondido a Macri en una carta del 17 de marzo, cuando hizo un pedido de disculpas en una carta general dirigida a quienes lo habían saludado por el aniversario de su pontificado: “A los que puedan sentirse ofendidos por algunos de mis gestos, les pido perdón”.
El Gobierno interpretó esa disculpa en referencia a que Francisco no viajó nunca a la Argentina pese a que lo hizo a casi todos los países de la región.
Ayer descartaban que lo haga este año (ver aparte). “Pensamos que la respuesta era aquella, porque se dirigió allí a ‘las autoridades’. Pero sorpresivamente ayer [por anteayer] llegó una respuesta especial al Presidente”, dijo a la nacion un alto funcionario.
En el Gobierno consideraron que el texto es “cordial y amistoso” y que tiende al “descongelamiento” de la frialdad que había comenzado en febrero de 2016, cuando el Papa recibió a Macri en Roma durante 22 minutos y con gesto adusto. En ese “deshielo” trabajan Estrada y el embajador ante la Santa Sede, Rogelio Pfirter.
La carta de ayer es del 21 de marzo y tardó 15 días por haber sido enviada por canales diplomáticos. “He recibido la carta de felicitación que me envió con motivo del quinto aniversario de mi elección. Agradezco sus palabras de aliento y cercanía”, dijo el Papa. Luego de animarlo a trabajar “en su alta misión al servicio del bien de esa Nación”, dijo que “el futuro se construye con el aporte de todos, desde la justicia social, el encuentro y la búsqueda de la unidad”. Por último, lo despidió con calidez: “Le aseguro mi oración por usted, su familia y por todo el querido pueblo argentino, que llevo en mi corazón”.
En el Gobierno no pasaron por alto los temas de la agenda que marcó: el bien del país, la justicia social, el encuentro y la búsqueda de la unidad, para superar los conflictos.