El Bafici, en marcha. Once días para celebrar el cine más audaz y diverso
La gran fiesta cinéfila de Buenos Aires empieza a vivirse en pleno con casi 400 títulos, 36 sedes repartidas por toda la ciudad y dos invitados de lujo: John Waters y Philippe Garrel
la gran fiesta anual de la cinefilia empieza hoy a vivirse en pleno. el vigésimo Festival de Cine independiente de buenos aires (bafici 2018) desplegará desde este jueves y hasta el domingo 22 su menú casi infinito de películas a lo largo y a lo ancho de la ciudad. en sus 36 sedes distribuidas en 15 barrios porteños (récord histórico para la muestra) se verán casi 400 títulos, un centenar de los cuales se exhibirán en carácter de première internacional.
Todo ese cine que cada vez cuesta más encontrar en la cartelera comercial dominará la ciudad durante los próximos diez días. un programa con las expresiones de mayor diversidad y audacia que puedan encontrarse hoy en el panorama cinematográfico mundial, con la presencia protagónica de la producción independiente nacional a través de 140 obras, entre cortos y largometrajes. una de ellas se espera con particular expectativa: las 14 horas de La flor, la nueva película de Mariano llinás, que podrá verse en tres partes de cinco horas cada una.
Como siempre, la programación incluye obras de grandes autores, películas de culto, grandes documentales musicales, mucho cine de animación (para chicos y grandes) y presencias internacionales muy destacadas. este año encabezan la nómina de visitas ilustres dos grandes directores: el estadounidense john Waters y el francés Philippe Garrel.
El Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (Bafici) apuesta a la comedia para la apertura de su vigésima edición. Anoche hubo una doble inauguración casi en simultáneo: en el Cine Gaumont se realizó la ceremonia oficial y luego se exhibió el film Las Vegas. La nueva película de Juan Villegas, protagonizada por Pilar Gamboa, Santiago Gobernori y Valentín Oliva (Wos), también se proyectó de forma gratuita y al aire libre en un auditorio en Plaza Francia.
Las Vegas es una comedia de enredos y (re)encuentros azarosos ambientada en Villa Gesell durante un fin de año. Hacia allí viajan, cada uno por su lado, Laura (Gamboa) y Martín (Gobernori), quienes están separados, pero cuando eran adolescentes se conocieron y engendraron a su hijo Pablo (Oliva) en ese balneario. Laura y Pablo, con todas las rispideces propias de una madre de 36 años y un muchacho de 18, se instalan en uno de los departamentos del edificio que da título a la película y, al poco tiempo, descubren que Martín está también en el lugar acompañado por Candela (Valeria Santa), su muy joven novia colombiana. El quinteto protagónico se completa con Cecilia (Camila Fabbri), una guardavidas algo más grande que Pablo, que se convertirá en su objeto del deseo. Todo servido para una exploración –hilarante en un principio, emotiva después y nostálgica siempre– sobre las crisis de parejas, las diferencias (y algunas coincidencias) generacionales, las relaciones entre padres e hijos y el despertar sexual.
Desde que en 2001 estrenó Sábado, otra comedia aunque con un humor más asordinado, que encabezaron Daniel Hendler y Gastón Pauls, Villegas presentó en el festival porteño todos sus cortos y largometrajes (Una tarde feliz, Los suicidas, Ocio, Victoria, Adán Buenosayres y Hugo). “Yo siempre elegí el Bafici, y no solo con mis películas, sino también con otras en las que participé como productor, como Una semana solos, Escuela Normal, Miss y Villegas. Por suerte, siempre el festival también me eligió a mí. Hay una fidelidad mutua en esta larga historia. En ese sentido, que Las Vegas sea la película de apertura lo siento como un reconocimiento a esa fidelidad que me llena de orgullo y también de ansiedad. Son días muy intensos los que estoy viviendo”, admite Villegas en diálogo con la nacion. Que el Bafici abra y cierre con comedias (en la clausura se proyectará Isla de perros, de Wes Anderson) es toda una declaración de principios. “Todavía existe cierto desprecio por las comedias en muchos festivales, sobre todo los europeos. Pero lo más preocupante es que se da sobre todo con las comedias de cinematografías periféricas y, más específicamente, con la latinoamericana. Como si no se aceptara que las películas de este lado del mundo puedan contar historias con humor, ser amables y felices”, agrega el realizador. Por último, Villegas reconoce que su incursión en el género era una cuenta pendiente en su carrera: “Sábado, mi ópera prima, tenía elementos de humor. pero terminaban prevaleciendo la oscuridad, el retrato de una angustia. Las Vegas es una comedia que no tiene ningún miedo de serlo”.