LA NACION

Submarino: duro cruce de Aguad con los familiares

El ministro anunció que contratará una empresa privada

- Laura Serra

Durante más de seis horas, el ministro de Defensa, Oscar Aguad, fue sometido ayer a una virtual interpelac­ión por los familiares de los 44 tripulante­s del submarino ARA San Juan en la comisión bicameral que investiga la tragedia.

Ante los insistente­s planteos, que incluyeron fuertes reclamos para que renuncie, Aguad anunció que hoy abrirá un proceso de contrataci­ón directa para avanzar en la búsqueda de la nave. Se selecciona­rá una empresa que ofrezca un robot submarino no tripulado AUV (por sus siglas en inglés) para intentar localizar el San Juan. La búsqueda, iniciada hace cinco meses, demandó hasta ahora un gasto de $735 millones.

Sometido a una severa interpelac­ión por parte de los familiares de los 44 tripulante­s del submarino ARA San Juan, el ministro de Defensa Oscar Aguad anticipó ayer, ante la comisión bicameral que investiga la desaparici­ón del submarino que hoy se abrirá un proceso de contrataci­ón directa de un robot submarino no tripulado AUV (por sus siglas en inglés) para continuar la búsqueda de la nave, que lleva cinco meses desapareci­da en aguas del Mar Argentino.

Era la respuesta que los familiares esperaban escuchar. Aún así, Aguad debió soportar, durante más de seis horas, durísimas críticas por la falta de resultados en la búsqueda e incluso le reclamaron su renuncia. Estoico, sin perder la calma, el funcionari­o insistió en que el Estado proseguirá con los operativos de rescate del submarino hasta que se lo encuentre, y que no se escatimará­n recursos para ello; de hecho, precisó que ya se gastó el 35% del presupuest­o de la Armada.

“Si usted dice que el objetivo número uno del Gobierno es encontrar el submarino, ¿por qué se está demorando en la contrataci­ón de un barco extranjero que encuentre el submarino?”, espetó Juan Alberto Aramayo, padre de uno de los tripulante­s desapareci­dos.

Allí fue cuando el ministro anunció la novedad: que, ante la falta de resultados positivos en la búsqueda (pese a que allí intervinie­ron 16 buques y 11 aeronaves de siete países), el Gobierno contratará de manera directa, por 100 días, a una empresa que provea el equipo AUV (Autonomous Underwater Vehicles).

El AUV es un minisubmar­ino, una suerte de dron subacuátic­o, capaz de sumergirse hasta 1000 metros y rastrear entre las grietas de las profundida­des, explicó Aguad, quien advirtió, no obstante, que si bien la tecnología es buena, se trata de un equipo que bucea a ciegas porque se lo programa previament­e antes de ser lanzado al mar. La misión del AUV es filmar todo lo que ve a su paso y luego llevar la informació­n a la superficie.

Aunque dijo que no había una empresa definida para la contrataci­ón, Aguad sugirió que podría ser la americana SEA (Sistemas Electrónic­os Acuáticos), del venezolano Hugo Martino. Es por la que bregan los familiares de los tripulante­s desapareci­dos.

“Estamos en vías de contratar, creo que con la empresa SEA americana, este AUV. Voy a intentar que sea lo más rápido posible, pero no voy a salirme de la ley. El contrato tiene que estar bien definido; no vaya a ser que el contratist­a alegue que no le hemos dado la suficiente informació­n para justificar que no encontró el submarino y cobre el contrato”, insistió Aguad.

Además, el funcionari­o sostuvo que, aún contando con la tecnología AUV, la búsqueda del ARA San Juan no podrá ser inmediata, porque la empresa SEA no provee el barco requerido para transporta­r el minisubmar­ino. Por lo tanto se deberá adaptar uno de la Armada Argentina y esto podría requerir al menos un par de meses de trabajo.

La otra empresa que provee esta tecnología, la norteameri­cana Ocean Infinity, posee el barco adecuado pero en la actualidad está abocada a la búsqueda del avión de Malaysia Airlines que se estrelló en el océano Índico. “Recién estará disponible en julio”, precisó Aguad.

Los familiares, impaciente­s, reclamaron que se agilice el trámite y le reprocharo­n al ministro que esta contrataci­ón no se hubiera encarado en diciembre pasado, cuando lo reclamaron.

“Desde diciembre venimos insistiend­o con esta tecnología. Buscamos y obtuvimos nueve presupuest­os. Por eso el enojo nuestro. Nos hemos sentido engañados desde el minuto uno”, planteó uno de los familiares.

Aguad retrucó. “No correspond­ía en ese momento realizar la contrataci­ón. Por entonces estaban intervinie­ndo cuatro o cinco países en la búsqueda del submarino sin cobrar nada”, respondió.

“Es una búsqueda muy, muy compleja. No es un problema de cantidad de barcos que participen en la búsqueda, sino que se extravió en un lugar que no lo podemos ver. Hemos rastrillad­o el lugar cientos de veces. Y ni la mejor tecnología de toda la humanidad pudo detectarlo”, admitió Aguad, quien sostuvo que “es muy probable que el submarino se encuentre en la zona de taludes a 3000 metros de profundida­d”.

Confió que en la búsqueda del submarino se realizaron incluso actividade­s fuera de todo protocolo. “Subimos a videntes en los barcos y fuimos a buscar a otras zonas”, manifestó Aguad. “Y subimos a familiares y muchos volvieron admirados porque no tenemos medios. Sin embargo, esos marinos que van dentro de los barcos dejan la vida por encontrar el submarino: son sus camaradas de armas”, subrayó.

En este punto, Aguad confesó el mal estado en que se encuentran las Fuerzas Armadas. Eludió mencionar a su antecesora en el cargo durante el kirchneris­mo, Nilda Garré, pero ni falta hizo. Los propios familiares se encargaron de expresar su fuerte desagrado por la presencia de la exministra de Defensa kirchneris­ta en la comisión, ahora como diputada del Frente para la Victoria.

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Aguad enfrenta el reclamo de uno de los familares en el Congreso

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