Verstappen, el nuevo villano de la Fórmula 1

El holandés quedó en el centro de las críticas tras sus repetidos errores en el actual torneo

Era un diamante en bruto, el ídolo en ciernes que esperaba la Fórmula 1, un futuro campeón mundial. Sin embargo, en su cuarta temporada en la máxima disciplina del automovilismo, los aplausos al desprejuiciado Max Verstappen (20 años) se volvieron reprobación y el holandés quedó expuesto como nunca antes a las críticas.

Al renovarle contrato por tres temporadas, la escuadra Red Bull lo señaló claramente como el piloto al que apostaba su porvenir, en desmedro del australiano Daniel Ricciardo. Semejante compromiso parece, por el contrario, haber hundido al joven holandés, que cometió errores apreciables en cada uno de los Grandes Premios de esta temporada. Mientras tanto, Ricciardo gana y ya lo duplica en puntaje (37 a 18) en el mundial.

En Australia, Verstappen dañó su auto muy pronto derrapando y haciendo un trompo, llegando apenas sexto; en Bahrein chocó en la clasificación y luego protagonizó en carrera un toque contra el Mercedes de Lewis Hamilton, abandonando; en China, por último, rifó una segura chance de victoria yéndose afuera cuando quería superar a Hamilton y, más tarde, sacando de pista a Sebastian Vettel. Una liviana penalización lo retrasó al quinto lugar.

“Normalmente aprendes de tus errores, pero no funciona con Verstappen. En algún punto, ya no es una cuestión de edad, sino una cuestión de inteligencia”, lo criticó el excampeón Niki Lauda.

“Necesita controlarse un poco”, opinó su mentor Hel mut Marko .“Le pedí que no se exceda, que su momento va a llegar. Sabe que ha perdido un triunfo”. El director deportivo de RedBull, Christian Horner, cree que un planteo más maduro no le quitará el instinto agresivo que lo ha hecho tan popular.

Vettel, que lo disculpó por el incidente, fue más benigno. “Esto le puede pasar inclusive cuando hiciste 300 carreras”. Verstappen, ya un veterano de 63 GGPP, sigue conservando un espíritu indomable. Los consejos de su padre Jos, que también corrió en F-1, no parecen hacer efecto.

El holandés aceptó que se había equivocado con Vettel pero repuso: “No hay nada que pueda cambiar ahora excepto analizar mi rendimiento y volver mucho más fuerte”. Lo necesita con urgencia para recuperar la confianza perdida.