Dos reuniones para “limar asperezas” que dejaron a todos aliviados
Luego de criticarlo duramente, el gobernador de Mendoza dio por terminada la pelea con Aranguren
No hubo pases de facturas ni reclamos. Después de las diferencias públicas, llegó la paz. Todas las reuniones fueron “ordenadas, rápidas y en un clima de colaboración”, según destacaron testigos de los encuentros. Así, atrás quedaron las quejas que manifestaron los socios del macrismo en Cambiemos por los aumentos de las tarifas de servicios públicos.
El duelo más esperado era el que protagonizaron el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, y el ministro de Energía, Juan José Aranguren, pero no hubo ni siquiera malas caras; todo fue armonía, según resaltaron desde la Casa Rosada y la gobernación.
Ambos fueron invitados por el presidente Mauricio Macri a la reunión de coordinación de ayer por la mañana. Incluso, después del encuentro, Aranguren y Cornejo se quedaron charlando unos minutos a solas para “limar asperezas”.
“Fue un acto de docencia”, describió un testigo del encuentro entre el responsable de Energía y el presidente del radicalismo. No hubo ni una sola mención de las duras críticas que el gobernador dedicó al ministro en los últimos días.
El Presidente llevó la voz cantante y explicó la posición del Gobierno. El déficit fiscal, según relató, no permite otro camino. Los incrementos de las tarifas nunca estuvieron en discusión. Cornejo, en tanto, presentó el plan que elaboró el radicalismo, que finalmente aceptó en parte el jefe del Estado.
Luego de más de dos horas de reuniones y debates, el Gobierno aceptó buena parte de la propuesta
El informe que encendió la alarma de los radicales
del radicalismo con “correcciones” al esquema tarifario de gas: el aplanamiento de las tarifas durante el año y postergar los cambios en lo que hace a la tarifa social. El gesto sirvió para apaciguar los ánimos.
El encargado de detallar los números macro fue el vicejefe de Gabinete, Gustavo Lopetegui. Según explicó, los servicios públicos representan casi el 8 por ciento del gasto de un hogar promedio.
En paralelo, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, recibió al presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó; y a los jefes de bloques que componen Cambiemos Mario Negri (UCR), Nicolás Massot (Pro) y Juan Manuel López (CC-ARI). Más tarde también se sumó Cornejo.
“Hemos sido escuchados”, aseguró el mendocino al finalizar el encuentro en el que todos se sintieron ganadores. Es que el Gobierno apaciguó el frente interno y mantuvo sin cambios los aumentos de las tarifas, y el radicalismo y la Coalición Cívica se llevaron un pequeño triunfo de la Casa de Gobierno.
Por la tarde todo era tranquilidad en la Casa de Gobierno, donde dieron por superado el conflicto.
“No hubo ninguna crisis, así funcionamos nosotros”, describió uno de los principales asesores del Presidente. La molestia del radicalismo con las tarifas de los servicios públicos comenzó a tomar forma en los últimos días, cuando algunas figuras representativas del partido, como el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo; el diputado cordobés Mario Negri, y el titular de la AGN, Jesús Rodríguez, leyeron un informe reservado sobre las boletas de gas que recibirán los usuarios hacia fines de este invierno.
El trabajo explica que las facturas de agosto serán hasta cuatro veces más altas que las de febrero por el efecto combinado de los últimos aumentos y el mayor consumo por las bajas temperaturas.
Puestos en cifras concretas, se puede entender la alarma de los socios políticos de Macri. Un usuario de bajo consumo que desembolsó $141 en el segundo mes del año pagaría $740 en el octavo, mientras que en el otro extremo, entre los que más consumen pasarán a desembolsar $5118, en comparación con los $1248 de febrero pasado. Es un 310% más.
El trabajo se hizo en el Instituto de la Energía General Mosconi, vinculado a la UCR a través de su presidente, Jorge Lapeña, exsecretario de Energía de Raúl Alfonsín y exdirector de Enarsa, a partir del cuadro tarifario de Metrogas.
El mismo Lapeña había sugerido el lunes en el programa Terapia de Noticias (por LN+), la conveniencia de aplicar un sistema de tarifa plana para el gas. Esa modalidad tiende a ensanchar las facturas que se pagan en las épocas de menor consumo, como el verano, y moderar las boletas que llegan en los meses más fríos.
Ayer, Negri dijo a la nacion que la propuesta del radicalismo no implica desfinanciamiento del Estado, sino “aplanar” el costo de las tarifas para que la estacionalidad no genere picos en el pago.
El equipo del ministro Juan José Aranguren evaluó esa alternativa al principio de la gestión, pero la descartaron por una cuestión sagrada para el Gobierno: enviaría señales erróneas de precios, cuando la intención oficial era que las personas paguen por la energía, al menos, lo que esta cuesta.