La oposición peronista calificó de “engaño” la propuesta del Gobierno

Intentará retomar la semana próxima el debate de los aumentos en la Cámara de Diputados

El peronismo, en todas sus vertientes, rechazó el esquema que acordó ayer el oficialismo para atenuar el impacto de las subas de la tarifa del gas. “Es un engaño, una provocación”, criticaron. Y doblará la apuesta: convocó a una reunión de comisiones el martes próximo en la Cámara de Diputados para buscar una “solución de fondo” al problema tarifario. No se descarta, además, el llamado a una nueva sesión especial en el recinto.

“El oficialismo no asume la gravedad del problema; no discute con la oposición y, entre ellos, acuerdan que las tarifas se paguen en cuotas y, encima, con intereses. Es ridículo”, planteó Pablo Kosiner (Interbloque Argentina Federal). Desde el Frente Renovador, Graciela Camaño coincidió: “El Gobierno patea para adelante el problema, no soluciona el tremendo colapso que causan las tarifas altas e irrazonables”, asestó.

“Es una tomada de pelo: desdoblar la factura y dar cuotas con interés no resuelve el problema”, fustigó el kirchnerista Agustín Rossi, “Es una provocación, con la nueva propuesta los argentinos pagarán más cara la tarifa”, completó Diego Bossio (Argentina Federal).

En paralelo, el jefe del bloque de senadores del PJ, Miguel Pichetto, reprodujo en la Cámara alta el proyecto que sus colegas diputados presentaron anteayer, el cual propone, en líneas generales, que las subas tarifarias de luz y gas no superen el coeficiente de variación salarial. Este proyecto, acordado entre el massismo y el interbloque Argentina Federal (que responde a los gobernadores del PJ), establece que la suba para las pymes no podrá ser mayor al índice de precios mayoristas. al tiempo que se les elimina la aplicación del 27% de IVA incluido en las facturas. La propuesta del kirchnerismo es más radical: retrotraer los valores tarifarios de luz, agua, gas y cloacas a diciembre de 2017. Recién en 2019 se podrían aplicar nuevos aumentos, pero sin superar la variación de los salarios.

Para discutir estas y otras alternativas, la oposición convocó para el martes próximo a dos de las comisiones que preside: Obras Públicas y Defensa del Consumidor, que conducen Sergio Ziliotto (Argentina Federal), y Marcela Passo (Frente Renovador). Contrario a sus deseos, no podrán emitir dictamen porque restaría la participación de una tercera comisión, la de Presupuesto. El oficialista Luciano Laspina, su presidente, no le facilitará el juego a los opositores y no la convocará. Ergo, sin dictamen de comisión, la oposición requerirá los dos tercios de los votos en el recinto para aprobar cualquiera de sus propuestas. Y no cuenta con semejante mayoría.

La oposición se sabe en una encerrona. Pero su apuesta real es al desgaste político del Gobierno; está convencido de que el malhumor social por el aumento tarifario irá in crescendo con el paso de los días. Por de pronto, la semana próxima convocaría a una nueva sesión especial; confían en que esta vez alcanzará el quorum, aunque teme que, durante este fin de semana, el Ejecutivo busque presionar a los gobernadores del PJ para frustrar la sesión. Anteayer, la oposición estuvo a un voto de conseguir quorum.

Si finalmente lo consiguiera la semana próxima, Cambiemos no tendrá otra alternativa que dar el debate para bloquear a la oposición y evitar que, con dos tercios, apruebe cualquiera de sus iniciativas.