Caputo: “Macri tiene asegurado el financiamiento para el resto de su mandato”
El funcionario defendió la gestión ante el FMI porque “da certidumbre y tranquilidad” a los mercados; además, criticó a la oposición por el proyecto para frenar el ajuste de tarifas
Luis Caputo no dejaba de mirar su celular. Antes de la conferencia que estaba por ofrecer en la Casa Rosada, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, le había mandado un mensaje por WhatsApp al ministro de Finanzas. El encargado de conseguir los dólares necesarios para mantener a flote el modelo económico de Cambiemos decidió leerlo en voz alta. “FYI (para tu información, según las siglas en inglés)”, comenzaba. “A medida que el gobierno de Macri busca un acuerdo con el FMI, es importante tener en claro que esta vez será muy diferente para la Argentina y el Fondo. Un reflejo no solo de las muy diferentes condiciones económicas nacionales y la calidad de la formulación de políticas, sino de un FMI muy diferente”. Las palabras –le aclaraba Peña a Caputo– eran de un tuit de ayer de Fiona Mackie, directora regional para América Latina y el Caribe de The Economist Intelligence Unit, un think tank perteneciente a la influyente publicación británica.
Para Caputo, como para el resto del gabinete económico, no hay dudas: el Gobierno tomó la decisión correcta al pedir apoyo al FMI. El ministro de Finanzas lo explica con un interrogante sencillo. “Vos sos un tenedor de bonos. ¿Qué preferís? ¿Saber que la Argentina ya no puede tener problemas, más allá de lo que pase afuera, o estar dependiendo de las volatilidades del mundo? Yo me quedo más cómodo con el colchón”, ejemplificó.
En un encuentro ayer con varios periodistas en el Palacio de Hacienda, el hombre con más de 30 años de experiencia en el mercado financiero ratificó el camino elegido por el equipo económico de Mauricio Macri. Aclaró que la actual corrida del dólar es consecuencia de la suba de tasas internacionales, que expone más a la Argentina porque el país tiene una debilidad: una mayor dependencia de los mercados externos que otros emergentes. “Es lo que intentamos remover yendo al Fondo”, afirmó el ministro.
Dijo que será importante el monto de la línea de crédito que pueda habilitar el FMI. Se refirió a los rumores que la sitúan en aproximadamente US$30.000 millones. “En el mercado ese número es alto. Sería fantástico. Sobra. Ahora, si fuera de US$10.000 millones, ahora sonaría a poco”, indicó el hombre, que ratificó que la tasa de interés de ese préstamo rondará el 4%. Sin embargo, se negó a dar más información y pidió esperar a que vuelva de Washington el equipo de Hacienda. “Esto es dar certidumbre y tranquilidad. Si pasa algo en los mercados, el presidente Macri tiene asegurado el financiamiento para el resto de su mandato”, indicó Caputo, que además celebró la aprobación, ayer, de la ley de financiamiento productivo.
No obstante, Caputo le agregó un condimento a la volatilidad argentina. “Cayó muy mal entre los inversores la actitud política de la oposición”, afirmó el funcionario. La suba de tasas, sumada al tema de las tarifas, “fue un combo muy malo”.
“Fue una desilusión ver a la oposición racional tratar de imponernos medidas populistas. Es que se trató de la misma oposición que nos había apoyado en políticas importantes. Los vieron como oportunistas políticamente y no actuando en beneficio del país. Para los inversores de afuera, de mirada de largo plazo, estos detalles no pasan desapercibidos”, dijo Caputo, y criticó: “Eso hizo que a la Argentina le fuera peor”.
“No subestimamos nada, por algo tomamos el 75% de las necesidades financieras en dos meses”, agregó el ministro de Finanzas. “Acá tomamos decisiones con el diario del viernes. Después nos aplauden o nos critican con el del lunes. Lo que hicimos no estaba mal. Está bien. Teníamos que tomar las precauciones por si este escenario se daba, y esa fue la decisión correcta. Después la coyuntura nos dio la razón. No tengo la bola de cristal. Lo hice porque sabía que podía pasar. Lo que pasó después no es solo la suba de tasas, sino esa suba y el complemento político, que cayó muy mal. Yo hablo con todos los inversores y sé que cayó pésimo. Era algo que no estaba en el tapete de nadie”.
Pese a este diagnóstico oficial, aclaró que no hay una crisis de confianza en el país, negó que hubiera retiros de depósitos en los bancos y también que el país haya estado cerca de un nuevo default. “No quiero menospreciar lo que está pasando. Pero tampoco exageremos. ¡Ni en broma [estamos cerca de un default]! Lo que pasó es razonable, era esperable”, aclaró. “Para que se profundice esta situación, tiene que haber algún cambio en los fundamentos de la economía y no hay nada de eso. Puede haber ruido, pero no va a alterar los fundamentos de la economía. Me encantaría que no hubiera pasado nada, pero pasó, y lo importante es que reaccionamos rápido”, agregó Caputo.
El funcionario ratificó –tal como anticipó en la conferencia de prensa con el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, el viernes pasado– que el mayor ajuste fiscal (un cambio de meta del 3,2% del PBI al 2,7%) redundará en un menor endeudamiento para este año. Las necesidades financieras pasaron de estar cubiertas en un 75% a un porcentaje de entre 80 y 85%, dijo. Estimó que para el año próximo las necesidades financieras son de unos US$25.000 millones. No obstante, afirmó que si se cumplen los cronogramas de los proyectos de participación público-pivada (PPP) hay una opción de que no se precise ir a busca financiamiento al exterior. “Sería una señal espectacular”, afirmó.
Caputo defendió el trabajo de Federico Sturzenegger en el Banco Central(BCRA)ytambiénladecisión del Gobierno de cambiar las metas de inflación el 28 de diciembre pasado, hecho al que muchos analistas le adjudican la causa de la pérdida de confianza en la independencia de la entidad a la hora de combatir la inflación. “Tener una meta de inflación del 10% no lucía realista”, dijo. Y para desmentir las críticas, recalcó que solo semanas después de esa polémica foto de Sturzenegger y Peña, entre otros, el Gobierno colocó US$9000 millones a “las tasas más bajas de la historia”.
“Ante la incertidumbre, yo tengo que proponer qué es lo mejor para lo argentinos. No tengo dudas de que el Presidente hizo lo mejor para todos. Antes las decisiones económicas se basaban en el rédito político. Hoy valoremos esto: tenemos un presidente que hace lo que es mejor para los argentinos a expensas de un costo”, dijo, y defendió el timing de la decisión: “No teníamos apuro. Venimos del séptimo trimestre de crecimiento y tenemos US$55.000 millones de reservas. Y eso te pone en una mejor posición de negociación”.
Luis Caputo
ministro de finanzas “Cayó muy mal entre los inversores la actitud de la oposición racional frente a las tarifas. La vieron como oportunista”