Autocrítica de Quintana por la política económica: “Las metas de inflación eran incumplibles” Medidas destacables
El funcionario reconoció que bajar los precios con un ancla cambiaria era una “bomba”
“Como verán el timing es una de mis virtudes. Ya irán descubriendo otras”, dijo el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, al llegar anteanoche a una de las salas del Centro Cultural San Martín y provocó risas en muchos de los miembros del Club Político Argentino, un colectivo de intelectuales nacido en 2008 que hoy cuenta entre sus miembros a algunos funcionarios de gobierno, como Hernán Lacunza y Pablo Avelluto.
No hizo falta aclarar que aludía a la crisis cambiaria que afecta al Gobierno. Durante una hora, Quintana esbozó líneas conceptuales de la administración Macri y sorprendió con la admisión de errores: el primero de ellos, la temprana fijación de metas de inflación, cuando Alfonso Prat-Gay era ministro de Hacienda: “Eso nos generó una inconsistencia desde el momento cero. Esas metas eran incumplibles”, dijo. Y agregó: “Queremos seguir usando un camino de desinflación que no requiera anclas cambiarias porque eso es una bomba”.
Sobre el proceso de negociaciones iniciado con el FMI, Quintana sostuvo que “está para respaldar el plan de gobierno y no para que el Gobierno haga el plan del Fondo”. Y reconoció el clima de angustia en días de escalada del dólar. “Las corridas cambiarias generan ansiedad, la idea de ‘¿dónde termina esto?’ Hay que parar la corrida y estamos haciendo todo lo que hay que hacer para pararla y recuperar la credibilidad erosionada, pero de ningún modo creo que haya una desconfianza generalizada, como sugieren algunos. Nos sobra paño para parar una corrida cambiaria”.
También admitió las consecuencias de la crisis económica. “Esta devaluación va a tener un impacto en la inflación y el crecimiento, pero vamos a hacer las correcciones para que sea el menor posible”.
Quintana sostuvo que el Gobierno tendrá que bajar el déficit fiscal, pero también se refirió a los economistas que circulan por los canales de televisión diciendo que hay que bajarlo y no dicen cómo. “Son los mismos que en privado nos dicen que hay que dejar sin jubilaciones a 4 millones de personas que se jubilaron por moratoria. Eso es lo que proponen y es lo que nosotros no vamos a hacer”, dijo.
Entre las medidas destacables, Quintana eligió la ley de defensa de la competencia: “Los argentinos y el capitalismo no hemos sido buenos amigos hasta el momento. Para que la economía de mercado funcione tiene que haber competencia, no cartelización. El nivel de cartelización de la Argentina es vergonzoso”.
A pesar de las turbulencias económicas y en vísperas del “supermartes” de la liquidación de las Lebac , Quintana mantuvo su compromiso de participar del encuentro, coordinado por Graciela Fernández Meijide . “Este es el mundo del revés. Ustedes vienen a escucharme a mí y yo creo que tengo que escucharlos a ustedes. Admiro mucho a muchos de ustedes”, les había dicho en el arranque. “Ya surgirán comentarios sobre nuestra incapacidad para comunicar”, anticipó.
Quintana marcó tres ejes del Gobierno: “El fortalecimiento institucional, el ordenamiento macroeconómico y la modernización del Estado”. Y recordó dos principios del Talmud: no mentir y no robar.