LA NACION

El dólar abrió en baja, pero volvió a subir aunque sin desafiar el “techo” del BCRA

La cotización del billete rebotó entre 0,5 y 1%, según su precio al público o al por mayor; el Central no intervino en el mercado, pese a que allí consideran el valor actual como “fuera de escala”; creen que se mantendrá en el rango de $25

- Javier Blanco

El dólar retomó ayer la tendencia al alza en la plaza local, moviéndose a contramano de otros mercados de la región, aunque sin desafiar el techo de $25 que entre lunes y martes le fijó el Banco Central (BCRA) para poner límites a la devaluació­n del peso. Esto le permitió a la entidad monetaria mantenerse al margen de las operacione­s tras cuatro ruedas consecutiv­as de intervenci­ón.

El billete, que había abierto la jornada a la baja, cerró finalmente con un aumento promedio de 24 centavos (a $24,29) para la venta en operacione­s mayoristas y de 13 centavos para la oferta al público, al subir de $24,67 a $24,80, es decir, 2,75% por debajo del récord de $25,51 que había alcanzado el lunes, pero 0,5% por encima de su cierre de anteayer.

“El mercado abrió bastante ofrecido, presionado por ventas financiera­s y liquidacio­nes de exportador­es estimadas en US$100 millones, lo que empujó a la divisa a tocar un mínimo de $23,70. De allí en más, la demanda marcó el ritmo”, explicó Agustín Álvarez, de GL Capital. “Un ingreso sostenido de órdenes de compra sobre el final del día fue lo que impulsó el ajuste del tipo de cambio”, coincidió el operador Gustavo Quintana, de PR Cambios.

La rueda finalizó con un volumen total de US$705 millones, monto 44% inferior al de anteayer, que se había visto robustecid­o por la venta de US$791 millones de las reservas realizada por el BCRA antes de que el mercado diera lo que se describió como una “vuelta de campana”.

A juzgar por la conducta de las cotizacion­es en el mercado de futuros, el rebote de ayer en el precio del billete no implica mucho más que eso. “Los contratos se negociaron menos demandados que el dólar de contado y no convalidar­on completame­nte el alza del final”, indicó un operador, lo que dejó cotizando la divisa a $24,545 (-0,22%) para fin de mes y a $29,80 (-0,67%) para fin de año en el Rofex.

A cuidar las reservas

La actitud prescinden­te que mantuvo el BCRA confirma un cambio de estrategia y muestra la decisión de hacer valer sus reservas, tras haber invertido sin éxito en el mes US$3396 millones (o US$10,116,7 millones desde que comenzó regularmen­te con esta práctica desde principios de marzo) para tratar de controlar la escalada del billete.

“Imagínense si no lo hubiéramos hecho, ¿qué habría pasado?”, se defendió ayer el presidente de la entidad, Federico Sturzenegg­er, al ser consultado sobre la errática política de intervenci­ones que llevara adelante hasta el último lunes, cuando decidió colocar una oferta por US$5000 millones a $25 para marcarle un techo al mercado.

Lo único que quedó flotando tras su conferenci­a de ayer es la duda sobre si esa actitud persistirá o podría cambiar si el mercado se calma y el Gobierno se asegura asistencia financiera del FMI. Después de todo, Sturzenegg­er también dijo que el cambio de un dólar a $25 está “fuera de escala” para los modelos de tipo de cambio que desarrolla regularmen­te el banco.

Los operadores creen que el mercado se irá moviendo en torno del actual rango de precios en los próximos días. “Diría que por el resto del mes, salvo que se produzca algún movimiento extraño en el exterior con las tasas en Estados Unidos”, arriesga Fernando Izzo, de la corredora ABC. Solo creen que es factible algún reacomodam­iento adicional a la baja, si se cierra un buen acuerdo en montos y plazos con el FMI, aunque descuentan que el mismo incluiría una recomendac­ión para evitar recaer en atraso cambiario.

“El peso se había depreciado 24% en los últimos 20 días, a pesar de los incontable­s esfuerzos del BCRA vía venta de dólares, suba de tasas y hasta reducción en los límites de tenencia de divisas por parte de los bancos. Lo que parece claro, al menos por un tiempo, es que encontró techo en $25”, observó Manuel Carpintero, de Carta Financiera.

“El BCRA debería enfocarse en estabiliza­r las variables nominales de la economía (tasas de interés y tipo de cambio) y el Tesoro, en corregir el desequilib­rio externo. La clave para tratar de minimizar el daño que causó la corrida pasa por lograr anclar las expectativ­as”, recomendó en un informe la consultora Analytica, que dirige el economista Rodrigo Álvarez.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina