Femicidio: pidieron una prisión perpetua
El acusado asesinó con un cuchillo a su expareja y a la hija de esta
Un fiscal porteño pidió que se condene a prisión perpetua a un hombre de 43 años acusado de asesinar a puñaladas a su expareja y a la hija de esta en julio del año pasado en el barrio porteño de Villa Lugano. La solicitud fue realizada por el fiscal Fernando Fiszer ante el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional (TOC) 16 de la ciudad de Buenos Aires, compuesto por los jueces Gustavo González Ferrari, Inés Cantisani y Hugo Decaria.
El funcionario del Ministerio Público pidió la pena de prisión perpetua para Rolando Javier Choque por considerarlo culpable del delito de “homicidio cuádruplemente agravado por haber ocurrido en una relación de pareja; por haber mediado alevosía; por haber constituido un femicidio; y por haber tenido como propósito causar sufrimiento a la persona con la que mantuvo una relación de pareja”.
El abogado de la querella, que representa al exmarido de Isabel Martina Tapia, de 43 años en el momento de ser asesinada, y padre de Jazmín Ámbar García, de 7, también solicitó la condena de prisión perpetua para el imputado por el delito de “femicidio cometido con alevosía”. En tanto, la defensa de Choque cuestionó que se tratara de una situación de violencia de género
en el marco de una relación de pareja y planteó la inconstitucionalidad de la prisión perpetua.
El fiscal Fiszer sostuvo durante su alegato que el acusado mató a puñaladas con un cuchillo de carnicero a su expareja y su hija entre las 6 y las 12 del 6 de julio del año pasado, en el departamento en el que convivían, informó el sitio web www.fiscales.gob.ar.
Según pudo establecerse, alrededor de las 6 hubo una discusión entre Choque y su pareja, quien le pidió que abandonara la vivienda. Fue entonces que el acusado fue a buscar un cuchillo con unos 30 centímetros de hoja y atacó a Tapia generándole lesiones en el antebrazo, heridas catalogadas como “de defensa”.
Luego la mujer se dirigió al comedor, momento en que se despertó su hija y se acercó hasta ella, como solía hacer ante cada una de las reiteradas discusiones.
Tapia le dio la espalda a Choque e intentó proteger a su hija haciendo de “escudo”, pero allí recibió seis puñaladas, tres de ellas por la espalda, al tiempo que el acusado logró herir a la pequeña a la altura del esternón.
“La muerte de Isabel es por proteger a su hija. Las dos estaban indefensas”, remarcó el fiscal.