Tras el veto, la CGT prepara una huelga para fines de junio y busca sumar a otros sectores
Los gremios definirán la fecha de la protesta cuando se conozcan detalles del acuerdo con el FMI
Después del veto presidencial al proyecto para retrotraer los aumentos tarifarios, el triunvirato de mando de la CGT resolvió avanzar hacia un paro general.
Con el calendario a mano, dos de los tres jefes de la central sugirieron a la nacion que la huelga podría activarse a fines de junio. Hasta entonces, los sindicalistas mantendrán abiertas las negociaciones con el Gobierno y esperarán a conocer más detalles sobre el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Sin embargo, hay otros dirigentes que sugirieron que el paro podría ser en agosto, después del receso invernal y del Mundial de Fútbol, un punto en el calendario que nada tiene que ver con los gremios, pero que se vislumbra ya como una suerte de bisagra en la trastienda política.
“Las condiciones de ir al paro están, ahora hay que sumar masa”, dijo ayer uno de los referentes cegetistas.
En esta lógica de reunir respaldos se enmarca el encuentro con la Iglesia del miércoles pasado y el que estaba previsto ayer con Miguel Ángel Pichetto y otros legisladores peronistas. La visita de Pichetto a la sede de Azopardo 802 se postergó para el martes próximo.
El argumento del cambio de fecha fue la “extensa sesión” en el Senado en la que se aprobó el proyecto de ley opositor para retrotraer los valores de las tarifas a noviembre del año pasado.
En el mismo sentido de reunir fuerzas se explica la presencia sindical hoy en el cierre de la Marcha Federal, que prevé un acto en el Congreso que se anticipa masivo, con los movimientos sociales y representantes de las tres centrales obreras.
Urgida por la coyuntura económica y con la necesidad de mostrarse con la guardia en alto ante otros sectores más combativos, la CGT convocaría a su consejo directivo para la semana próxima. El triunvirato que integran Héctor Daer, Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña medirá allí la temperatura para definir la fecha de la huelga y acordará el listado de reclamos que presentará.
Héctor Daer integrante del triunvirato el referente de “los gordos” en el triunvirato de mando de la Cgt avalaría el paro general. también Juan Carlos Schmid, representante del moyanismo. el barrionuevista Carlos acuña está en duda
Habrá una postura crítica sobre la negociación con el FMI, a quien los gremios identifican con la flexibilización de las leyes laborales, y se exigirá la reapertura de las paritarias tras los acuerdos, por considerar que los acuerdos del 15% serían “duplicados” por la inflación.
Causó además malestar entre los sindicalistas la reacción del Ministerio de Trabajo a partir de la filtración de la comitiva argentina que asistirá a la cumbre de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en Ginebra. “Dijeron que a cuatro de nosotros nos pagan el via- je y te aseguró que no es así”, marcó distancia un dirigente que figura en el listado de viajeros, pero que decidió quedarse ahora en el país.
El ministro de Trabajo, Jorge Triaca, está en París con la comitiva gubernamental que asistió a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), según informó ayer uno de sus voceros. Pasaría hoy por Roma, donde podría visitar al papa Francisco, y el lunes desembarcará en Ginebra, para la cumbre de la OIT, con una tropa gubernamental de 47 personas.
El debate por la eventual huelga se trasladará de manera inevitable a Ginebra. A partir de la semana que viene confluirán en los pasillos del organismo funcionarios y legisladores, un grupo numeroso de sindicalistas y el empresariado. El triunvirato de la CGT, que no irá a Suiza, relativizó las negociaciones que puedan darse del otro lado del mundo. “El consejo directivo casi en plenitud va a estar en el país, viendo qué hacemos”, dijo un influyente dirigente del transporte.
Las dos vertientes de la CTA, en tanto, resolvieron activar un paro conjunto el viernes 8 de junio próximo, con una movilización a la Plaza de Mayo.