Los nuevos discos de Parquet Courts, Hamonnd Jr. y The Voidz renuevan las playlists del rock con aire fresco
En su nuevo álbum confirman que el multitasking ya es un género musical del siglo
Siete años en la vida de Parquet Courts pueden parecer muchos más que en otras vidas. Y son exactamente siete los años que separan su disco debut, American Specialties, del flamante Wide Awake! En el medio, innumerables vidas, referencias, mutaciones y una sola propuesta: hacer lo que se les venga en gana.
Surgidos en Denton, Texas, pero radicados desde hace ya algunos años (¿o vidas?) en Nueva York, Andrew Savage, Austin Brown, Sean Yeaton y Max Savage, irrumpieron en el albor de la segunda década del siglo con una idea tan alocada como básica. Indie rock de guitarras ruidosas envuelto en un celofán de post-punk que cautivó rápidamente el oído de los más nostálgicos. Encima, editaron el primer álbum de manera limitada en cassette y aún hoy ni siquiera aparece en Spotify. Su producción es tan amplia como ecléctica: desde el primer grito de American Specialties, Light Up Gold (2012), Sunbathing Animal (2014), Content Nausea –bajo el seudónimo “Parkay Quarts”–, Monastic Living, un EP de nueve canciones experimentales.
Human Performances apareció en 2016 y entregó uno de los puntos más altos de la corta pero recargada carrera musical de Parquet Courts, que no sabe parar. En 2017 estuvieron de visita por la Argentina en el marco del festival BUE, se unieron al productor y compositor italiano Daniele Lupi, sumaron a Karen O (Yeah Yeah Yeahs) y lanzaron Milano, una de las propuestas más interesantes de su repertorio. El álbum es conceptual y se sitúa a mediados de los 80 en la ciudad de Milán, en Italia. La combinación de músicos bajo las órdenes de Lupi alcanza su mejor faceta en canciones como “Talisa” o “Flush”.
Si Milano fue casi un proyecto paralelo de la banda, una parada en el viaje, podríamos decir que el camino que iniciaron en Human Performances se retoma en el flamante Wide Awake!, quizá su mejor disco hasta la fecha. Con la producción de Danger Mouse (Gorillaz, Beck, Red Hot Chili Peppers), Parquet Courts encontró su mejor forma y lo hace saber de entrada con “Total Football”: “Somos conductores de sonido, calor y energía/Y apuesto a que pensaste que nos habías descifrado desde el principio”, increpa Andrew Savage. Y obliga a reflexionar. Una vez más, la banda apunta a la deformidad de lo uniforme. Después del punk llega algo de funk con “Violence” y todo se calma con la casi reggae “Before the water gets to high”. Luego de la guitarreable “Mardi Grass Beads”, aparece el mejor momento de todos: “Almost Had to Start a Fight/In and Out of Patience”. Impredecible, cambiante y enérgica, casi como una metáfora de lo que es y puede llegar a ser Parquet Courts cada vez que se lo propone.