LA NACION

Los testimonio­s apuntan contra la pareja de Soriano

- Valeria Musse

La madre y la hija de Érica Soriano expusieron ayer los problemas observados en la relación entre la joven desapareci­da en agosto de 2010 y su pareja, Daniel Lagostena, que está acusado por el homicidio de esa mujer en el contexto de un acto de violencia de género.

Al dar su testimonio ante los magistrado­s del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N° 9 de Lomas de Zamora, María Esther Romero detalló los últimos días de su hija embarazada. Contó que le había llamado la atención que Érica abandonase la costumbre de visitarla cada sábado y domingo. “La última vez que la vi fue el miércoles de esa semana en mi casa. Ahí fue cuando la escuché decir ‘estoy viviendo una pesadilla’”.

Cuando la fiscal le preguntó a la testigo qué pensó cuando su hija se refirió a una “pesadilla”, María Esther dijo, emocionada: “Como Flor –la hija de Érica– ya no estaba viviendo con ella, y era lo que más amaba, pensé que se refería a eso”. Sin embargo, su declaració­n apuntó a la mala relación que su hija sostenía con Lagostena. Y recordó que su hija no estaba bien de ánimo en los días previos a su desaparici­ón.

Por su parte, Florencia, hija de Érica y de 19 años, comentó que “al principio, la convivenci­a con su madre y Lagostena iba bien, pero que después hubo conflictos”. Y agregó: “Un día, Daniel me dijo que íbamos a pasar a buscarla por el trabajo para darle una sorpresa. Nos quedamos parados en la vereda de enfrente para ver si la veíamos con algún chico”, contó la adolescent­e, que entonces tenía 12 años y que tras esa situación dejó de vivir con la pareja formada por su madre, y quedó bajo el cuidado de su padre.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina