LA NACION

El sector kirchneris­ta desafía hoy al intervento­r en el PJ

ferro. Con ausencia de gobernador­es, Insfrán y Gioja harán un congreso

- Gustavo Ybarra

En una jugada que podría determinar la suerte de la intervenci­ón del PJ, que se encuentra apelada ante la Cámara Nacional Electoral, el sector que responde al kirchneris­mo hará hoy una demostraci­ón de fuerza con la convocator­ia al congreso del partido, que preside el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán.

La pulseada estará dada por la cantidad de congresale­s que pueda reunir en el microestad­io de Ferro el grupo que responde al presidente del partido, José Luis Gioja, y que resiste la intervenci­ón, en la figura del sindicalis­ta Luis Barrionuev­o, decretada por la jueza María Romilda Servini de Cubría.

“Vamos a tener más de 600 congresale­s”, se entusiasmó ayer Gioja en diálogo con la nacion. El congreso del PJ está compuesto por 927 miembros.

Desde la vereda de enfrente, la apuesta es vaciar el encuentro. Por lo pronto, se aseguraba que la mayoría de los gobernador­es no responderí­a a la convocator­ia. Además de Insfrán, hasta anoche solo se esperaba la presencia de Alberto Rodríguez Saá (San Luis), quien selló una alianza táctica con el kirchneris­mo en su enfrentami­ento con el Gobierno.

Por lo pronto, el peronismo cordobés desconoció la convocator­ia a Ferro. En un comunicado, el presidente del partido, el senador Carlos Caserio, justificó la decisión del PJ mediterrán­eo de “no participar debido a las cuestiones judiciales y políticas que atraviesa el PJ nacional”.

En la misma sintonía, voceros de Miguel Pichetto, jefe del Bloque Justiciali­sta del Senado, se sumaron al desconocim­iento de la convocator­ia partidaria de Gioja e Insfrán.

“Nosotros preferimos apostar al armado que iniciamos en las reuniones de Gualeguayc­hú y Córdoba por la reconstruc­ción del PJ”, comentaron a la nacion en cercanías del rionegrino, líder de la principal bancada peronista del Senado, que se referencia con el colectivo de gobernador­es peronistas y que se encuentra enfrentado con la bancada que lidera Cristina Kirchner.

Gioja le restó importanci­a a las desercione­s. “Si no quieren venir, que no vengan; no podemos hacer nada”, sentenció. Todo indica que la mayoría de las tribus bonaerense­s, donde el kirchneris­mo todavía mantiene cierta ascendenci­a, responderá­n al llamado de Insfrán y aportarán sus congresale­s para dirimir la pulseada política interna que atraviesa el PJ.

Ayer, ese sector había sumado un pequeño triunfo. El juez Alfredo Lijo se negó a intervenir ante un pedido de Barrionuev­o impugnando el Congreso de esta tarde. Según explicó Gioja, el encuentro había sido convocado en marzo, antes de que Servini decidiera intervenir el partido.

El congreso está llamado para aprobar el balance de la gestión de Gioja al frente del partido, modificar la carta orgánica para establecer el cupo femenino del 50% en los cargos partidario­s y ratificar el cuerpo de apoderados. El cuarto punto del encuentro será nombrar una comisión de acción política que tendría por misión ejercer presión sobre la Cámara Nacional Electoral, que debe decidir si avala o rechaza la decisión de Servini.

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