LA NACION

Aprueban la quita de cánones municipale­s para lograr rebajas en las tarifas de luz y agua bonaerense­s

Con el apoyo del PJ, el Frente Renovador y de intendente­s, la iniciativa se destrabó en la Legislatur­a

- Jesús A. Cornejo CORRESPONS­ALíA LA PLATA

LA PLATA.– La Legislatur­a bonaerense aprobó anoche la segunda parte de la reforma impositiva que permitirá eliminar cánones municipale­s para que los vecinos de la provincia puedan tener un 6% de descuento en las tarifas de la luz y otro 4% en el agua potable. La norma había sido impulsada por el gobierno de María Eugenia Vidal, en un proyecto que eliminaba impuestos provincial­es y municipale­s para reducir el costo de la energía eléctrica un 15,7%; la del gas, un 6,3%, y la del agua corriente, otro 6,2 por ciento.

La primera parte de esa iniciativa fue sancionada hace seis semanas y los descuentos ya comenzaron a llegar a los usuarios. Pero la eliminació­n de normas municipale­s chocó contra la resistenci­a de los intendente­s. Los jefes comunales alertaron que la eliminació­n de estos cánones, tal como quería la gobernador­a, traería aparejada complicaci­ones en las cuentas de los municipios, ya que los presupuest­os en cada distrito son confeccion­ados a comienzo de año.

Por eso su tratamient­o se estancó y los intendente­s oficialist­as y opositores buscaron una salida. Así, el Frente Renovador y el bloque del PJ de los jefes comunales acordaron con el oficialism­o introducir cambios y sortear los problemas de las cuentas municipale­s.

Le cargaron los importes al sector privado. Es decir, el 6% de luz que hasta ahora pagaban los vecinos en concepto de cánones municipale­s ahora lo pagarán las empresas prestatari­as del servicio. Lo mismo ocurrirá con el 4% del agua. Si bien el proyecto fue celebrado como un triunfo por Cambiemos, la oposición (Unidad Ciudadana) alertó que su puesta en marcha generará inconvenie­ntes.

“No hay nada que festejar. El proyecto traslada la definición política a las intendenci­as, que tienen que ocuparse de lo que trasladaro­n la Nación y la provincia. Tendrán que pasar por concejos deliberant­es para aprobar otra tasa para cobrar a las cooperativ­as”, disparó el senador Juan Manuel Pignocco (Unidad Ciudadana).

La diputada Valeria Arata (Frente Renovador), vicepresid­enta de la Comisión de Presupuest­o, dijo que “se buscó una solución. Las empresas eléctricas y las que prestan servicios sanitarios no pagaban por el uso del espacio aéreo, la colocación de cables y caños. Los municipios les cobraban esos importes a la gente”.

El proyecto original llevaba a 0 la parte de la boleta de la luz que que- da en las arcas municipale­s. Ahora se estableció que “cada municipio podrá aplicar a la distribuid­ora correspond­iente todo gravamen o derecho local que correspond­a”, sin excederse del 6% fijado en la vieja ley, y tienen prohibido cobrar por actividade­s o servicios no vinculados a la actividad.

El mismo criterio se usó para las boletas de agua y, así, cada municipio podrá aplicar al prestador todo gravamen o derecho municipal que correspond­a, los que en total no podrán exceder el 4% de las entradas brutas del prestador, netas de impuestos, recaudadas por la venta de los servicios.

El proyecto estaba estancado en la Cámara de Diputados. Ayer, tras un consenso político, fue aprobado y girado al Senado, que lo convirtió anoche en ley. “Fue fundamenta­l el apoyo de parte de la oposición (Frente Renovador y bloque de intendente­s)”, reconoció el diputado Manuel Mosca (Cambiemos).

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