Afirman que el escándalo del fútbol no daña los lazos con Israel
partido. La comunidad judía destacó la profundidad de la relación bilateral
El escándalo por la suspensión del partido previo al Mundial entre la Argentina e Israel no tendrá impacto en el vínculo bilateral entre ambos países, que se profundizó fuertemente en los últimos dos años. Así lo afirman en el gobierno de Benjamin Netanyahu, a través de su embajador en nuestro país, y en el gobierno argentino, además de referentes de la comunidad judía sin rol diplomático.
“El partido no va a ser una mancha en la relación bilateral. La relación va más allá de un partido”, sostuvo en diálogo con la nacion Ilan Sztulman, el embajador de Israel en la Argentina. Aseguró que el vínculo entre ambas sociedades es de “mucha afinidad” y remarcó que los gobiernos están actualmente “muy cerca”, al compartir “agendas avanzadas y positivas”.
Pese a que cuando se conoció la noticia de la cancelación debido a las amenazas que recibieron los jugadores de la selección hubo contactos entre Mauricio Macri y Netanyahu, la influencia política no logró que se diera marcha atrás.
El mandatario israelí llamó al Presidente para pedirle que intercediera en la decisión de la AFA, pero al poco tiempo, relató Sztulman, Macri le devolvió la llamada para decirle que no pudo hacer cambiar de parecer a las autoridades de la asociación, quienes ya habían decidido que el partido no se iba a jugar en Jerusalén ni en ninguna otra ciudad, al menos antes del Mundial.
El canciller argentino, Jorge Faurie, opinó en la misma línea que Sztulman, al afirmar que las relaciones bilaterales no se vieron dañadas pese al revuelo generado, y que el vínculo seguirá siendo “de una gran significación”. Faurie aprovechó para reiterar que “en su momento la cancillería argentina le hizo conocer a la AFA la sensibilidad que tenía que hubiera quedado el partido trasladado a Jerusalén”.
Fuera del ámbito diplomático, las asociaciones que representan a la comunidad judía lamentaron la decisión de suspender el partido, al que calificaron como una cesión ante el terrorismo, pero también coincidieron en que el vínculo no se erosionará.
“Esto no es una mancha para la relación entre los países. Sí genera una desilusión el hecho de ceder ante una amenaza del terror”, señaló a este diario el presidente de la AMIA, Agustín Zbar, que estaba en España viajando hacia Israel. “En la AMIA lo sentimos como un nuevo golpe, que de alguna manera se conecta con la bomba [del atentado de 1994]. Deberíamos haber aprendido a no ceder nunca ante las amenazas. Es triste que por miedo se cambie la decisión”, agregó.
Zbar tenía pautado desde hace tiempo el viaje, así como tenía previsto asistir al partido. El lunes se reunirá con Netanyahu y durante el resto de la semana mantendrá encuentros con autoridades educativas israelíes, con el objetivo de fomentar la cooperación bilateral. “En vez de afectarla, la actividad se hará más intensa”, ratificó el dirigente acerca del vínculo bilateral.
Por su parte, el presidente del Consejo Federal de la DAIA, Diego Dlugovitzky, aseguró que “de ninguna manera se verán afectadas las relaciones”, y expresó su solidaridad con la selección y con Lionel Messi “porque han tomado una decisión amenazados” por el terror. “Tenemos claro que cuando el terrorismo amenaza lo hace muy en serio. Igualmente lamentamos la decisión porque, justamente, al terrorismo se lo opone con la continuidad de la vida cotidiana”, sostuvo.