China alardea de la armonía de su cumbre y le envía un mensaje a Occidente
El encuentro con líderes asiáticos mostró unidad; Putin dijo que quiere reunirse con Trump
QUINGDADO.– Mientras el grupo de países que forma el G-7 celebraba una tumultuosa cumbre en Canadá, el presidente chino, Xi Jinping, organizaba su propio encuentro con invitados de alto rango proclamando la armonía y con un llamado a una mayor cooperación internacional.
Hay que acabar “con la política corta de miras de las puertas cerradas” que solo se centra en uno mismo, dijo Xi en la reunión de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) en la ciudad de Qingdao, en el este de China.
También pidió la reducción de las tensiones en el comercio global. “Tenemos que mantener las reglas de la Organización Mundial del Comercio, apoyar el sistema de comercio multilateral y crear una economía global abierta”, aseguró.
La cumbre que reúne sobre todo a países asiáticos se celebró este año en Qingdao coincidiendo con la del G-7 en Canadá. El presidente chino abogó por una mayor ampliación de la OCS, fundada en 2001 y que representa el 20 por ciento del comercio mundial y el 40 por ciento de la población del planeta.
Una “mayor fortaleza” de la organización implicará que se le preste más atención en la comunidad internacional, señaló.
Por invitación de China participaron este año, entre otros, el presidente ruso, Vladimir Putin; el primer ministro indio, Narendra Modi, y el presidente iraní, Hassan Rohani, así como los dirigentes de Bielorrusia, Paquistán, Afganistán, Kirguistán, Uzbekistán y Tayikistán.
China invirtió mucho en el encuentro como anfitrión. En el puerto de Qingdao se construyó un nuevo centro de congresos para la cita y anteayer los líderes fueron recibidos con un show de luces y fuegos artificiales.
Los medios estatales chinos intentaron borrar la impresión de que se trata de un nuevo intento por aumentar la influencia geopolítica de China. Mientras que el G-7 trata de crear un orden mundial “en el que se favorece al mundo occidental”, la OCS no va de “juegos geopolíticos” ni “confrontación internacional”, aseguró el diario cercano al gobierno Global Times.
El viernes, poco antes del inicio de la cumbre del G-7 y la de la OCS, China y Rusia se unieron simbólicamente. Durante una visita a Pekín, Xi le otorgó a Putin una medalla al honor dorada y calificó al ruso como su “mejor amigo”.
Ayer, Putin dijo que está abierto a reunirse con Trump “en cuanto Estados Unidos esté dispuesto al encuentro”.