LA NACION

Pararán el jueves y el viernes los docentes en la provincia

Los maestros porteños se sumarán a la protesta pasado mañana

- María José Lucesole CORRESPONS­ALÍA LA PLATA

Los gremios docentes bonaerense­s convocaron ayer a un nuevo paro de 48 horas a partir de pasado mañana, con lo cual los alumnos perderán otros dos días de clases. Así, habrán acumulado ocho jornadas sin actividad escolar desde el inicio del año.

La medida fue acordada por el Frente de Unidad Docente, que adhirió a la protesta nacional de la CTA del jueves y extenderá hasta el viernes el cese de actividade­s, en una decisión que profundiza el conflicto salarial con el gobierno de María Eugenia Vidal. En tanto, los docentes porteños enrolados en la UTE se plegarán a la huelga de la CTA del jueves.

LA PLATA.– El conflicto docente se profundiza en la provincia de Buenos Aires. Los sindicatos que integran el Frente de Unidad Docente convocaron a una huelga para el jueves y el viernes en las escuelas bonaerense­s, y evalúan no volver a clases luego del receso de invierno.

La medida por 48 horas fue resuelta por la Federación de Educadores Bonaerense­s (FEB), la Unión Docentes de Buenos Aires (Udocba) y el Sindicato Unificado de Trabajador­es de la Educación (Suteba), al adherir al paro de la CTA de pasado mañana y llamar para el viernes a una huelga en las escuelas bonaerense­s.

En tanto, en la Capital Federal, la Unión de Trabaadore­s de la Educación (UTE) –uno de los principale­s gremios docentes porteños– se sumó también a la medida de fuerza de la CTA y hará el jueves un paro en las escuelas de la ciudad de Buenos Aires. Participar­á, además, en la movilizaci­ón del jueves a la Plaza de Mayo, en reclamo de paritarias y contra los tarifazos y el acuerdo con el FMI.

Con el paro de dos días en las escuelas bonaerense­s, en los primeros tres meses del año lectivo se habrán perdido ocho jornadas de clases.

El año pasado, el mayor conflicto se vivió durante el primer semestre. Ahora la ecuación podría cambiar, dado que se espera mayor conflictiv­idad en la segunda mitad del año. “Si no hay novedades vamos a profundiza­r las medidas de fuerza”, afirmó a la nacion Roberto Baradel, líder de Suteba.

Los gremios anunciaron un banderazo por la educación pública para el martes 19. Exigen que el gobierno de María Eugenia Vidal vuelva a convocar para negociar en paritarias, dado que trascurrie­ron 50 días desde la última reunión. En esa ocasión rechazaron la oferta de un aumento salarial del 10%, más un pago por presentism­o en el primer semestre, con la promesa de volver a negociar en julio.

El gobierno de Vidal depositó, de todos modos, el 10% a cuenta del convenio que finalmente se pueda lograr. Pagó, así, el anticipo en tres cuotas entre abril, mayo y junio. Vidal espera ahora conocer los detalles finos del ajuste que le tocará a la provincia de Buenos Aires, tras el acuerdo con el FMI para volver a sentarse a negociar.

La mandataria sabe, además, que posiblemen­te la recaudació­n de ARBA se desacelere en el segundo y tercer trimestre, y no quiere arriesgar una oferta antes de estar segura del dinero que dispondrá en sus arcas para mejorar los salarios de los 280.000 docentes de la provincia.

“El gobierno de Vidal continúa profundiza­ndo el ajuste en educación y dilata la resolución del conflicto salarial porque lleva más de 50 días sin convocar a paritarias”, advirtió ayer el Frente de Unidad Docente Bonaerense.

“El salario está congelado desde octubre de 2017 y la política económica ha impactado fuertement­e en el poder adquisitiv­o, con un deterioro superior al 12%”, agregó la organizaci­ón sindical.

Descuentos

El gobierno de Vidal volverá a descontar los días de paro y analiza cómo recuperar los ocho días de clases perdidos. En principio ya se resolvió usar las jornadas destinadas al perfeccion­amiento docente para recuperar contenidos en las escuelas afectadas por los paros.

Se analiza, además, extender las clases en las vacaciones de invierno o de verano. El año pasado Vidal firmó una resolución para recuperar los días perdidos. Pero no se hizo efectiva, dado un recurso de amparo a favor de los sindicatos.

Ahora ante la profundiza­ción del conflicto, el director general de Cultura y Educación, Gabriel Sánchez Zinny, considera las alternativ­as para no perder más contenidos. Hasta ayer no se considerab­a una nueva convocator­ia a los docentes en una mesa de negociació­n.

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