Por la crisis cambiaria, desplazan a Sturzenegger y asume Caputo
El presidente del Banco Central se vio forzado a renunciar tras perder credibilidad en un día en el que el dólar trepó hasta $28,43; Macri decidió reemplazarlo por el ministro de Finanzas y darle más poder a Dujovne
En medio de una crisis de confianza en los mercados, el presidente del Banco Central (BCRA), Federico Sturzenegger, se vio forzado a renunciar ayer y será reemplazado por el ministro de Finanzas, Luis Caputo.
La decisión se tomó en una reunión de emergencia entre el presidente Mauricio Macri y parte de su gabinete en la quinta de Olivos luego de que el dólar cerrara a $28,43, en una jornada en la que el BCRA no intervino y después de que el Gobierno publicara el texto del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). La cartera de Finanzas será absorbida por el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, que gana más poder.
“En los últimos meses diversos factores fueron deteriorando mi credibilidad como presidente del Banco Central, atributo central para llevar adelante la coordinación de expectativas tan importante en la tarea que me había encomendado, motivo que hoy me impulsa a presentarle mi renuncia indeclinable”, escribió Sturzenegger en su carta de dimisión dirigida a Macri.
La paciencia del Gobierno para que el presidente del Banco Central (BCRA), Federico Sturzenegger, recuperara la confianza del mercado y siguiera en su puesto se agotó ayer. Tras la corrida cambiaria que comenzó a fines de abril y terminó con un crédito stand-by del Fondo Monetario Internacional (FMI), los cuestionamientos a la credibilidad del BCRA desde el sector financiero y el desplome de los bonos argentinos, Sturzenegger fue forzado a renunciar. Será reemplazo por el ministro de Finanzas, Luis Caputo.
La decisión se tomó anoche en una reunión de emergencia en la quinta de Olivos de la que participaron Caputo; el ministro de Hacienda y coordinador del equipo económico, Nicolás Dujovne, y el presidente Mauricio Macri. Estuvieron también Marcos Peña, Gustavo Lopetegui, Mario Quintana y Rogelio Frigerio, pudo saber la nacion. Con Sturzenegger se irá todo el directorio. La decisión fue comunicada el mismo día en el que se conoció el memorándum entre el Gobierno y el Fondo. Paradójicamente, entre sus compromisos contempla la ampliación de la autonomía del BCRA y una mayor estabilidad de sus funcionarios.
Con ese contexto en mente, el comunicado ayer de Presidencia fue cauteloso: “Federico Sturzenegger le presentó hoy su renuncia al presidente Mauricio Macri en una reunión en la quinta de Olivos, quien le agradeció por el trabajo realizado durante su gestión al frente del BCRA”. El actual Ministerio de Finanzas se reunificará con el de Hacienda. El reemplazante de Caputo sería el secretario de Finanzas, Santiago Bausili. Habrá detalles en una comunicación hoy a la mañana.
“Federico había perdido credibilidad. Hacía falta un cambio de imagen y Caputo es una persona en la que los mercados confían”, dijo una fuente que estuvo en Olivos. “Es una decisión que el Presidente venía masticando hacía mucho y lo que pasó hoy con el dólar colmó el vaso”.
Las versiones sobre el alejamiento de Sturzenegger resonaban desde la noche del martes, luego de dos jornadas en las que el BCRA debió vender cerca de US$800 millones para contener, sin suerte, el valor del dólar. Todo después de que el FMI anunció, el jueves pasado, que la Argentina recibiría US$50.000 millones. El presidente del Central, en conferencia de prensa, dijo que ya no ofertaría US$5000 diarios a $25 como lo venía haciendo para frenar la cotización del dólar. Viernes, lunes y martes, el peso se depreció pese a que anteayer Finanzas anunció que el BCRA vendería desde la semana que viene US$7500 millones por cuenta del Tesoro.
El equipo de comunicación y los directivos de la entidad desmintieron durante todo el día de ayer que Sturzenegger se fuera. “Lo escuchamos a la mañana y nos causó gracia”, dijo uno de los funcionarios. “Cada vez que sube el dólar, aparece ese rumor”, justificó otro.
Las críticas se multiplicaron ayer a las 15, tras el cierre de la jornada cambiaria. El dólar se apreció casi 7% en 24 horas y trepó a $28,43 en el segmento minorista sin intervención del Central ni al contado ni en futuros. Todo con un volumen operado muy limitado, de US$336 millones. Antes del anuncio de la salida de Sturzenegger, en el BCRA volvieron a aludir que la intervención en la plaza debe responder a una “disrupción” y que el mercado debe hacer el ajuste necesario. El FMI –explicaron– no aportaría dinero para que el dólar se atrasara.
Sin embargo, en el mercado criticaban ayer que el Central había sumado “un nuevo error” que había mantenido a sus funcionarios toda la tarde al teléfono. El ruido se había generado con la interpretación del anexo del memorándum firmado con el Fondo que parecía afirmar que la entidad se encaminaba a comprar dólares para incrementar sus reservas en los próximos meses, un elemento que sumaría más presión a la cotización de la divisa.
En sus contactos con los operadores del mercado, el BCRA tuvo que explicar que no existían recompras de reservas, cuyas tenencias netas son actualmente de US$23.100 millones. En los períodos descriptos en el memorándum, las reservas suben unos US$5500 millones, mejora que proviene de sumar los US$7500 millones del desembolso del FMI y restar los US$2000 millones que el organismo habilita a vender para suavizar los saltos de la cotización. El piso mínimo de reservas estipulado con el Fondo –a auditar– es de US$21.100 millones.
La suba de tasas en EE.UU., ratificada anteayer con un nuevo aumento y más por venir, sumada a la incertidumbre local tuvo impacto numérico. El bono soberano AA22, uno de los más observados, acumula este año una variación negativa de 7,48%. El bono a 100 años, de 19,56%. El riesgo país aumentó 156 puntos en 2018 (de 351 a 507) cuando el de Brasil en el mismo período subió 90 puntos y el de Uruguay, 51 puntos. Síntomas de la desconfianza que genera el país.