LA NACION

Las definicion­es de último momento que dieron vuelta la tendencia negativa

Los diputados de La Pampa, que finalmente apoyaron el proyecto, fueron determinan­tes para conseguir la aprobación; el oficialism­o mostró una profunda división interna

- Laura Serra

Fue una votación no apta para cardíacos. Hasta el minuto final nadie podía aventurar a ciencia cierta cuál sería el veredicto tras casi 24 horas de debate ininterrum­pido que demandó esta sesión histórica. Finalmente, el proyecto de legalizaci­ón del aborto se impuso por 129 votos positivos frente a 125 negativos en la Cámara de Diputados. Una diferencia mínima en la que fueron decisivos los cambios de voto a último momento.

A priori pueden extraerse varias conclusion­es llamativas de la votación en general. Primero: el proyecto trazó un corte transversa­l en casi todos los bloques legislativ­os; solo cuatro (la izquierda; los puntanos de Unidad Justiciali­sta; Evolución Radical, de Martín Lousteau, y Elijo Catamarca) mantuviero­n el voto unánime de sus miembros. Segundo: contrario a lo que se especulaba, no hubo ausencias (solo la del kirchneris­ta Julio De Vido, detenido por causa judicial) y se registró apenas una abstención, la de la diputada cordobesa Alejandra Vigo, esposa del gobernador Juan Schiaretti. Tercero: la mayoría de los indecisos que postergaro­n su decisión hasta el final inclinaron la balanza en favor del proyecto. Cuarto: el voto positivo provino, mayoritari­amente, de los diputados de Buenos Aires, de la Capital y de las provincias del sur del país.

Por último, un dato que debe encender las luces amarillas en el Gobierno: la sesión de ayer dejó un tendal de heridos entre los diputados de Cambiemos, sin duda el bloque más golpeado después de la votación. La salida intempesti­va de Elisa Carrió (Coalición Cívica) del recinto, indignada con el desarrollo y el corolario de la sesión, fue una muestra elocuente de la tensión reinante.

La pregunta del millón es por qué la taba se dio vuelta a último momento cuando la tendencia, hasta casi el final de la sesión, era hacia el rechazo del proyecto. Una de las claves fue la decisión del PJ pampeano de unificar su postura en favor del proyecto; para ello fue decisivo la llamada de último momento del gobernador Carlos Verna. Así, cuando faltaban apenas dos horas para la votación, el diputado Sergio Ziliotto comunicó por las redes sociales que junto a sus compañeros Melina Deliú y Ariel Rauschenbe­rger (que en principio votaban en contra) apoyarían la iniciativa de legalizaci­ón del aborto. Quien también cambió su voto a último momento fue el fueguino Carlos Romá (Cambiemos). Todos daban por descontado su rechazo al proyecto; el legislador había participad­o, incluso, de la foto de diputados y funcionari­os públicos convocada por la vicepresid­enta Gabriela Michetti en favor de las dos vidas. “Aquello que me llevó a reflexiona­r respecto de mi anterior decisión recae absolutame­nte en el debate y en la aceptación de un flagelo social existente e innegable”, explicó Romá luego, en un comunicado.

Poco después se conoció que dos diputados de Cambiemos, Hugo Marcucci y José Luis Riccardo, que habían anunciado su intención de abstenerse, finalmente votarían a favor. Riccardo, presidente de la Comisión de Educación de la Cámara baja, logró incluir en la iniciativa la creación de una comisión bicameral que monitoree la instrument­ación, en todo el país, de los planes de educación sexual.

Estos cambios de último momento corrieron como reguero de pólvora en el Salón de los Pasos Perdidos y en el recinto, donde se sucedían los últimos discursos. El cambio de tendencia comenzaba a insinuarse. La votación, que se realizó poco antes de las 10 de la mañana, lo confirmó. En la nómina se refleja el voto de los indecisos que postergaro­n su decisión hasta el final. Votaron a favor Mirta Pastoriza (la única representa­nte del Frente Cívico por Santiago que se desmarcó del bloque), Héctor Stefani (Cambiemos) y Jorge Franco (Frente de la Concordia de Misiones), sobre quien se especulaba que se ausentaría.

El oficialism­o evidenció una fuerte división interna. En este bloque de 108 miembros se impuso el rechazo al proyecto, con 65 votos negativos frente a 42 positivos. Dentro del mosaico oficialist­a, en el bloque de Pro primó el voto negativo (37) –cabe recordar que el presidente Mauricio Macri se había expresado “a favor de la vida”–, mientras que 17 votaron por la positiva. En el radicalism­o, 24 apoyaron la iniciativa y 16 la rechazaron. En la Coalición Cívica, de sus 10 miembros, uno solo (Juan Manuel López) votó a favor. Tres aliados de Cambiemos votaron por la negativa.

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