En su primera visita oficial a Berlín, Conte escuchó promesas de la canciller
Italia, junto con Grecia, recibe el mayor flujo de refugiados que ingresan en países europeos
BERLÍN (DPA).– La canciller alemana, Angela Merkel, se comprometió ayer en Berlín con el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, a brindarle ayuda para hacer frente a la problemática derivada de la crisis migratoria que afecta al país mediterráneo.
“No queremos dejar escapar la ocasión y queremos ser solidarios”, dijo la jefa del gobierno en Berlín en una comparecencia conjunta ante la prensa sin preguntas antes de mantener un encuentro a puertas cerradas con su homólogo italiano.
“Por eso vamos a ver cómo podemos abordar la crisis migratoria en el norte de África, sobre todo en Libia”, agregó la dirigente en un momento en el que la Unión Europea (UE) busca un consenso para gestionar la gran afluencia de solicitantes de asilo a su territorio.
Sometida desde hace días a cuenta de la política migratoria a una gran presión de su ministro del Interior, que amenaza incluso con romper la coalición de gobierno en Alemania (ver aparte), la canciller aboga por sacar adelante una solución europea y consensuada en la que incluye la idea de alcanzar acuerdos bilaterales con los Estados más afectados, como Italia. “Sin una decisión europea, el fenómeno migratorio está destinado a permanecer sin control. Italia no puede continuar haciéndolo sola [...]”, subrayó Conte, para apuntar que confiaba en un cambio de perspectiva en Europa. “Las fronteras italianas son fronteras europeas, en vez de aceptar divisiones debemos actuar todos juntos [...]”, dijo el líder italiano, que también pidió que los migrantes puedan presentar sus solicitudes de asilo en sus países de origen o en países de tránsito.
Conte abogó asimismo por seguir respetan do el derecho internacional y
conminó desde Berlín a sus socios europeos a buscar soluciones conjuntas que no pongan en peligro conquistas alcanzadas, como la zona Schengen, que permite el tránsito de pasajeros en los países de la UE sin necesidad de aplicar control de pasaportes.
Al mismo tiempo, destacó la necesidad de hacer una reforma del llamado sistema de Dublín, que estipula que cada Estado se responsabiliza de los inmigrantes que pisan por primera vez Europa en su país y que condena a naciones como Italia o Grecia a hacer frente a la llegada masiva de cientos de miles de personas.
Conte asumió el 1° de junio al frente de una coalición euroescéptica y xenófoba en la que destaca el ministro del Interior y líder del partido ultraderechista Liga, Matteo Salvini, que hace dos semanas bloqueó la llegada a Italia de un barco de rescate con 629 migrantes a bordo. Italia pide desde hace tiempo mayor apoyo europeo para hacer frente a la llegada de cientos o miles de migrantes por mar cada mes.
Merkel y Conte, que ya se habían conocido en la cumbre del G-7 celebrada en Canadá, se reunieron para preparar la cumbre de la UE de finales de junio en un encuentro que precede el que la canciller mantendrá hoy con el presidente francés, Emmanuel Macron.