Las dos vidas
Tengo 20 años y no quiero aborto en la argentina. Las mujeres que se pronuncian a favor de la legalización dicen estar luchando por los derechos de todas las mujeres, pero no nos representan a todas. Pienso que las ideologías nos ciegan la vista en el debate. En realidad, no hay nada que discutir: la vida humana comienza en el momento de la concepción. Lo pueden llamar cigoto, feto o embrión: no deja de ser un ser humano. negarlo, decir rotundamente que el embrión no es vida humana, es simplemente una manera de callar a gritos la verdad. Es ampararse en el relativismo hueco que hoy en día impregna la opinión colectiva. creo que le tenemos miedo a la verdad y ese temor es lo que hace del discurso feminista un discurso egoísta. Me pregunto: ¿por qué en las marchas proaborto no se ve ni una bandera argentina; y en las marchas en contra abundan las banderas argentinas? Ellas, engañadas por sofismas vacíos, solo luchan por sí mismas (o creen hacerlo). Mi lucha, al pronunciar #Salvemoslasdosvidas, es por el bien de la argentina. incluso es por el de los que usan el pañuelo verde: porque estoy segura de que el aborto jamás será una solución. Porque abortar, matar a un hijo que habita en el propio vientre, es ir en contra de la naturaleza de la mujer; no ayudarla. Lucía Delorme
Dni 40.538.219